Tegucigalpa, Honduras.- Honduras enfrenta en octubre de 2025 un episodio de lluvias intensas que ha provocado inundaciones, deslizamientos y comunidades incomunicadas.
Según el balance oficial más reciente, 9 personas fallecieron y 10,161 resultaron afectadas; 2,134 familias fueron impactadas de forma directa, 836 catalogadas como damnificadas y 289 evacuadas.
También se reporta que 65 comunidades permanecieron incomunicadas, con mayores incidencias en Francisco Morazán y emergencias en Cortés, Comayagua, La Paz, Intibucá, Lempira, Choluteca, Santa Bárbara, Valle, Ocotepeque y Yoro.
En el sur, Nacaome, Goascorán y San Lorenzo registraron inundaciones en zonas residenciales y agrícolas; en Choluteca, vientos racheados y crecidas ocasionaron severos daños.
¿A quién llamar?
En caso de emergencia, el primer paso es reportar la situación a los números oficiales. El 911 atiende rescates, inundaciones y urgencias médicas y coordina la respuesta inmediata con instituciones de socorro.
La línea 198 de la Cruz Roja Hondureña ofrece atención médica y apoyo en zonas afectadas, incluidas evacuaciones y primeros auxilios.
El 199 del Cuerpo de Bomberos responde a rescates en áreas inundadas, derrumbes y otras situaciones de riesgo. Además, la Línea 100 opera a nivel municipal en todo el país para canalizar reportes locales, coordinar apoyos y solicitar evacuaciones donde el acceso es limitado.
Al comunicarse, procure describir con precisión el lugar, las referencias y el tipo de amenaza (crecida de río, deslizamiento, colapso estructural, personas atrapadas o lesionadas).
Autoridades y rescatistas subrayan que no se debe cruzar ríos, quebradas o vados durante crecidas repentinas, ni conducir por calles anegadas.
Si observa señales de peligro —aumento de caudal, ruidos de deslizamiento, grietas o filtraciones— evacúe de manera preventiva y avise a vecinos y familiares.
Dónde recibir atención y refugio
Las municipalidades y las oficinas locales del Comité Municipal de Emergencias (CODEM) son el primer punto de contacto para damnificados por pérdida de vivienda o daños estructurales severos.
Allí se gestiona la asistencia inicial y se canalizan necesidades urgentes. Las regionales de Copeco coordinan la distribución de ayuda en articulación con otras instituciones del Estado y organizaciones humanitarias.
La Cruz Roja Hondureña facilita asistencia en terreno, entrega de insumos y evacuaciones médicas.
Copeco, en conjunto con alcaldías y CODEM, habilita refugios temporales en escuelas, iglesias o centros comunales.
Las familias de zonas vulnerables deben consultar con autoridades locales o miembros del CODEM para conocer el albergue más cercano y los requisitos de ingreso.
Se recomienda llevar documentos de identidad, medicamentos, artículos de higiene y ropa básica; evitar regresar a viviendas con daños visibles hasta recibir autorización técnica.
El pronóstico del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) indica que el país continuará bajo influencia de una vaguada, con convergencia de viento y humedad del Caribe y el Pacífico.
Se esperan lluvias de moderadas a fuertes, con tormentas eléctricas principalmente en las regiones suroccidental, centro y oriente; en el resto del territorio podrían presentarse chubascos dispersos.
Copeco extendió la alerta roja por 24 horas para Francisco Morazán, Lempira, La Paz e Intibucá; mantiene alerta amarilla en Choluteca, Valle, Comayagua, Ocotepeque y El Paraíso; y alerta verde en Copán, Yoro, Santa Bárbara, Cortés y Olancho.
Las autoridades insisten en asegurar techos, limpiar cunetas y tragantes, y mantener libres los desagües para mitigar inundaciones urbanas.
La consigna oficial es clara: ante la duda, evacuar con anticipación y reportar a las líneas 911, 198, 199 o Línea 100. La respuesta oportuna salva vidas.