TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La elección del nuevo presidente ejecutivo del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) está envuelta en la opacidad por los intereses de un pequeño grupo de países fundadores y socios extrarregionales.
También han afectado la transparencia en la administración del banco al aprobar medidas que restringen las funciones del presidente ejecutivo Dante Mossi y limitan la política de comunicación.
Son Costa Rica y Guatemala, con una participación de 10.68% del capital cada uno (714 millones de dólares, respectivamente), los que han impulsado en los últimos meses una campaña de desprestigio en contra del presidente del BCIE, quien será reemplazado por un profesional de cualquiera de los países citados anteriormente.
Mossi confirmó a EL HERALDO que esos países han realizado campañas en contra de su gestión, antes de la asamblea de mayo pasado en República Dominicana y después de ese evento que cerró con la decisión de la asamblea de gobernadores de no permitir la reelección de Mossi.
A lo anterior se suma Taiwán, que es el mayor socio extrarregional del banco con un aporte de 11.37% ($776.2 millones), al respaldar las “medidas transitorias” aprobadas por el directorio para trasladar funciones de Mossi al vicepresidente Jaime Roberto Díaz Palacios.
Díaz Palacios aparece en la terna final de candidatos a la presidencia ejecutiva de ese organismo financiero regional, con su oficina principal en Tegucigalpa.
Otro elemento que agrega es el rompimiento de las relaciones diplomáticas de Honduras con Taiwán, lo que ha afectado la administración del Banco Centroamericano al retirar ese país asiático el apoyo a Dante Mossi, así como a cualquier profesional hondureño que aspirara a la presidencia ejecutiva del BCIE.
Silencio cómplice
Los acontecimientos en la oficina principal del Banco Centroamericano han venido siendo denunciadas por EL HERALDO en las últimas semanas.
El contralor y la asamblea de gobernadores del BCIE han recibido sendas cartas de Mossi exponiendo la persecución de la que ha sido objeto por el directorio y la preocupación de bancos de inversión y organizaciones de la sociedad civil por el manejo del concurso para elegir al presidente ejecutivo.
EL HERALDO ha realizado gestiones con gobernadores y directores de países socios para conocer la opinión de lo que ocurre en esa institución financiera, sin encontrar respuesta.
A pesar de que la asamblea conocía las medidas del directorio en contra de Dante Mossi y del manejo del proceso de elección, fue hasta la noche del miércoles anterior que comenzaron a pronunciarse los gobernadores como el de Honduras, quien a través de la secretaria de Finanzas, Rixi Moncada, posteó en su cuenta de X el malestar por la exclusión de Hugo Noé Pino de la terna final.
También el gobierno de Costa Rica presentó la noche del pasado miércoles una impugnación en contra de su compatriota Bernardo Alfaro, horas después de conocerse que este aparecía en la terna final de candidatos a la presidencia del BCIE integrada por la costarricense Ana Guisella Sánchez Maroto y el guatemalteco Díaz Palacios.
Todas esas “medidas transitorias” como los denominó el directorio fueron denunciadas por Mossi al secretario del Comité de Contraloría del BCIE, Jorge Muñoz, en una carta enviada el 8 de agosto de 2023, sin que hasta la fecha se hayan tomado los correctivos.
La situación interna en el Banco Centroamericano se agudizó después que la asamblea de gobernadores aprobó en República Dominicana, en mayo pasado, no permitir la reelección de Mossi para un período de cinco años más.
En esa ocasión la asamblea también acordó un proceso de transición mientras se elige el nuevo presidente ejecutivo para asegurar la gobernanza del BCIE.
Esa resolución, la que fue enumerada como AG-6/2023 con fecha de 15 de mayo de este año, es la que el directorio utilizó como base legal para restringir las funciones administrativas y operativas de Mossi, trasladando varias atribuciones al vicepresidente.
El contralor y la asamblea de gobernadores se han llamado al silencio ante los atropellos del directorio.
Situación geopolítica
Las relaciones diplomáticas entre los países fundadores y los socios extrarregionales como la ruptura de Honduras con Taiwán han tenido un impacto en la administración del banco y en el proceso de elección del nuevo presidente ejecutivo del BCIE, quien deberá asumir el cargo el próximo 1 de diciembre por cinco años y prorrogables por un período más.
Un ejemplo de lo anterior es que Taiwán en una alianza con Corea del Sur, México y España apoyaron la decisión del directorio de trasladar funciones asignadas a Mossi y contempladas en el convenio constitutivo del BCIE.
Durante la elección de la terna final de candidatos , los países asiáticos, o sea los directores de Taiwán y Corea del Sur, apoyaron a los aspirantes de Costa Rica y Guatemala, sobre todo a la costarricense Ana Guisella Sánchez Maroto, de acuerdo con lo informado por fuentes ligadas al banco.
El candidato de Honduras, o sea Hugo Noé Pino, no recibió el respaldo de los países asiáticos como Taiwán ni de Costa Rica y Guatemala.
Esa decisión es lo que molestó a la secretaria de Finanzas de Honduras, Rixi Moncada, quien es la gobernadora propietaria ante la asamblea, al considerar que Pino era el mejor candidato para ocupar ese cargo.
Pino era el único entre los seis profesionales que contaba con estudios de posgrado y con amplia trayectoria al haber ocupado la presidencia del Banco Central de Honduras, la secretaría de Finanzas, la representación de Centroamérica ante el BID, a lo que se suma su experiencia en la docencia y en la investigación.
Será la asamblea de gobernadores del próximo 17 de noviembre la que sabrá si elige o no al presidente ejecutivo de la terna del directorio.
