Luego de una visita complicada no hay nada mejor que volver a casa.
Motagua se instaló en el Nido Azul para regenerarse porque en menos de una semana tendrá que hacerle frente a dos compromisos de vital importancia contra Platense y Olimpia.
Por fortuna, el Ciclón regresó en perfecto estado, solamente con los cuerpos adoloridos de los jugadores que tuvieron participación ante Marathón.
El cuerpo técnico preparó un trabajo suave para el equipo azul y una charla para tocar los puntos claves del duelo de las emes que recién pasó. Hoy comienzan a enfocarse en el equipo porteño.
Héctor Chori Sosa tuvo la oportunidad de debutar con Motagua. El atacante argentino entró al minuto 69 en lugar de Carlos Discua. Sosa entró enchufado, como queriendo dar su carta de presentación, y en pocos minutos se vio envuelto en una jugada de peligro para los Verdes. No obstante, apenas sacó un remate suavecito que Mathías Rolero controló.
“La verdad estaba muy ansioso por jugar porque yo lo único que quería era anotar un gol. El partido estaba muy apretado, pero es una pena que el campo estaba lleno de agua y no pudimos desplegar el fútbol como queríamos”, dijo Sosa.
Buscó los goles
Al Chori se le vieron un par de cosas interesantes, por ejemplo ese dominio de balón que caracteriza a los sudamericanos. Sin embargo, su principal trabajo fue fortalecer el ataque.
“Me sentí bien porque noté al equipo muy comprometido en ganar el partido, pero hay que ir mejorando día a día ya que el campeonato viene iniciando y espero seguir teniendo oportunidad de jugar”. Agregó que, “soy consciente de que puedo darle más a Motagua, pero no me voy a presionar porque el equipo me necesita muy tranquilo”.
En esos 21 minutos que Héctor jugó contra el Monstruo, se dio cuenta que en Honduras el fútbol es más aguerrido y de contacto físico que en Sudamérica. “Los hondureños son fuertes y rápidos, pero uno debe mostrar con picardía y viveza que tiene cualidades grandes para jugar al fútbol”.
La competencia
Rubilio Castillo ya tuvo la oportunidad de marcar su primera diana con la camisa motagüense y eso lo pone un pasito adelante del Chori, quien sigue en cero en su cuota goleadora. “Uno como delantero siempre quiere debutar con goles o cuando llegas a un equipo nuevo lo primero que quieres es anotar, pero estoy tranquilo, sé que los goles van a llegar y creo que vamos por buen camino”.
Ahora Motagua se dirige a Comayagua, donde está una de las mejores sedes del fútbol.
El Estadio Carlos Miranda posee un campo envidiable y no habrá excusas sobre el rectángulo de juego. “Muy linda cancha, siento que es un poco chica en relación a las que había jugado anteriormente en Argentina, pero se puede jugar buenos partidos ahí”.
“Creamos situaciones”
El funcionamiento ofensivo de Motagua todavía es una incógnita ya que Rubilio Castillo apenas ha marcado un gol y lo hizo a través de un penal. El Chori es uno de los llamados a aportar su cuota goleadora.
“Nosotros estamos creando muchas situaciones de gol y los compañeros que atacan (Rulo y Rubilio) los vi muy juntos y atacando bien. Tenemos buen plantel y con cada fecha iremos mejorando”, señaló.
Motagua recibe a un Escualo golpeado por el Real Sociedad. Los Tiburones fueron goleados 5-1 en Tocoa y tienen el orgullo herido.
Ahora los dirigidos por Memo Bernárdez llegan a Comayagua con una urgencia tremenda de sumar.
“Ahora tengo que pensar en Platense, un rival que no le ha ido bien y que va a querer ganarnos para sumar puntos de visita. Nosotros debemos mantenernos fuertes y ganar porque estamos en casa”, dijo Sosa.
La confianza es el principal alimento de Chori Sosa desde que llegó de Argentina. El goleador quiere hacerse un nombre en el fútbol catracho y solo lo conseguirá con goles.
“Yo confío en mis compañeros, en el trabajo que hago a diario y en la confianza que me da el entrenador. Lo mejor que puedo hacer es trabajar con todo y en los partidos buscar los goles lo más concentrado que pueda”.