Tegucigalpa, Honduras.- Bajo el ardiente sol del Plan de San Antonio, en el municipio de Sabanagrande, un torrente de sonrisas iluminó la modesta escuela que, con apenas dos maestras para la escuela y una para el kínder, es el refugio del conocimiento para decenas de niños.
En esta comunidad, donde el calor es intenso y las necesidades aún mayores, la llegada de la Maratón del Saber de EL HERALDO se convirtió en un respiro de esperanza.
Más de 80 niños de la escuela y kínder, con los ojos brillantes de emoción, recibieron cuadernos Quick y libros de diversas materias de Santillana, útiles que para muchos significan más que simples herramientas de estudio: son la llave hacia un futuro mejor.
Con manos pequeñas y corazones enormes, cada niño sostuvo sus cuadernos con la promesa silenciosa de aprender más, de soñar más, de construir un mañana lleno de posibilidades.
Las maestras, verdaderas heroínas de la educación, recorren largas distancias cada día para llegar a esta escuela y kínder, donde enseñan con vocación y entrega.
El momento de la entrega fue un verdadero festival de sonrisas y gratitud. Los niños, con sus uniformes llenos de orgullo, corrían de un lado a otro, mostrando sus nuevos cuadernos y hojeando con curiosidad los libros, como si fueran cofres llenos de tesoros.
Sus pequeñas manos acariciaban las portadas con asombro, mientras comentaban entre ellos sobre las materias que aprenderían con sus nuevos materiales.
Los padres de familia, con rostros marcados por el esfuerzo diario, observaban la escena con emoción contenida. Para muchos, era un alivio inmenso ver que sus hijos tendrían cuadernos nuevos sin el peso de preguntarse cómo costearlos.
“Estamos muy agradecidos con Diario EL HERALDO por este apoyo, que para estos lugares que hay tanta pobreza es un gran aporte, son útiles escolares que tanto necesitan los niños, con esto los niños se motivan e incentivan a seguir estudiando”, expresó Nely Osorto, directora de la Escuela Plan de San Antonio.