Tegucigalpa, Honduras.- La neblina de la fresca mañana cubría el paisaje de los cerros que rodean el caserío de Agua Escondida, Lepaterique, Francisco Morazán.
Los niños, con mejillas sonrojadas por el frío, corrían emocionados hacia su escuelita Juny Goldberg, un lugar acogedor para aprender y descubrir nuevos conocimientos.
Ese día, un regalo especial iluminó el rostro de los pequeños, quienes recibieron con alegría lápices y cuadernos nuevos para escribir sus historias gracias a la campaña Maratón del Saber, que llegó hasta las montañas de Lepaterique para entregar útiles escolares.
Con los ojos brillantes de emoción, Ángel Funes estrechó un cálido abrazo con los miembros del equipo de EL HERALDO, al mismo tiempo que agradecía la noble labor.
“¡Muchas gracias por venir hasta aquí y regalarnos estos cuadernos!”, exclamó mientras sujetaba con fuerza el kit de útiles.Los 24 alumnos, desde kínder hasta sexto grado, recibieron con entusiasmo cuadernos y lápices, herramientas esenciales para su aprendizaje diario.
Y es que la Maratón del Saber, impulsada por EL HERALDO y sus aliados solidarios, hace posible que niños como los de la comunidad de Agua Escondida reciban cuadernos nuevos, donde sus hojas en blanco se convierten en lienzos para plasmar sus sueños.
Cada letra del abecedario será una llave hacia el conocimiento, y cada fórmula matemática, un peldaño para alcanzar el futuro.“Gracias a EL HERALDO por sus donaciones.
Los padres de familia y maestros nos sentimos agradecidos por el apoyo a los niños de estas comunidades”, expresó emocionada Floris Paola López Martínez, directora del centro educativo.
Estos útiles escolares llegan a los niños más necesitados del país y el municipio de Lepaterique no es la excepción.Los proyectos se realizan gracias a la generosidad de personas y empresas como Papelería Quiñones, con Cuadernos Quick, y el brazo solidario de Editorial Santillana.
Agua Escondida se encuentra aproximadamente a 45 kilómetros de Tegucigalpa. Es un caserío que pertenece a la aldea El Espino, donde no hay energía eléctrica y los niños deben caminar largas distancias para poder asistir a su escuela.
El presidente de padres de familia, Ángel Antonio Funes, agradeció el gesto de llegar hasta su comunidad, ya que los útiles son herramientas esenciales para aprender a leer y escribir.