La Catedral San Miguel Arcángel, considerada la madre de los templos de Honduras, pasa por un proceso de restauración, en lo que corresponde a la cúpula y cañón central, tanto en la parte interna como externa.
Este proceso se debe a que desde hace dos años se descubrió que esta iglesia, que fue declarada Monumento Nacional en 1967, presentaba fisuras y grietas debido a la humedad.
“Los movimientos telúricos que se han presentado en los últimos años reactivaron las grietas en el templo, a esto hay que sumar la vibración que producen los buses y el transporte pesado que pasa por el frente”, informó Carlo Magno Núñez, canciller de la Arquidiócesis de Tegucigalpa.
Este proyecto se realiza desde hace tres meses y ya se logró resanar la parte externa y actualmente el trabajo se concentra en el área interior. La inversión de las obras es de alrededor de 1.5 millones de lempiras y está disponible la cuenta 013000007481 de Banpaís para los interesados en hacer sus donativos.
Se estima que para la fiesta en honor a San Miguel Arcángel, en septiembre próximo, el proyecto esté concluido.