Tegucigalpa, Honduras.- El Hospital Escuela (HE) ha atendido 125 hondureños por mordeduras de serpiente venenosa en lo que va de 2025. La mayoría de los pacientes provienen de los departamentos de Francisco Morazán, Olancho, Yoro y El Paraíso.
Ante el inisual aumento de casos, el centro asistencial confirmó la adquisición de 431 frascos de suero antiofídico, con un costo cercano a 300,000 lempiras, necesarios para tratar envenenamientos por serpientes como cascabel, tamagás, coral y barba amarilla.
Los médicos recalcan que las mordeduras de serpiente son emergencias de alto riesgo, por lo que el personal debe contar con el biológico disponible las 24 horas, listo para administrarse apenas ingresa el paciente.
El portavoz del Hospital Escuela, Miguel Osorio, informó que desde el almacén de medicamentos se distribuye suero de respaldo tanto a la emergencia de adultos como a la pediátrica, debido a que el ingreso de pacientes puede ocurrir “en cualquier instante. De día o de noche podemos recibir alguna persona mordida por una serpiente peligrosa”, indicó.
Además, otra reserva del antídoto se mantiene disponible en la farmacia de consulta externa, que opera permanentemente para responder a situaciones de urgencia.
Los médicos explican que tanto en adultos como en niños se utiliza una dosis promedio de 5 a 10 viales de suero antiofídico, dependiendo de la gravedad del caso, y que el producto se aplica por vía intravenosa diluido en suero fisiológico o glucosado.
El Departamento de Epidemiología del HE indicó que los 125 pacientes atendidos este año lograron recuperarse gracias a la atención médica inmediata y al uso oportuno del antídoto, lo que ha evitado complicaciones severas o fallecimientos.
Las edades de los afectados oscilan entre 2 y 85 años, y la mayoría de los pacientes corresponde al sexo masculino, debido a actividades agrícolas en zonas boscosas.
Las autoridades del HE recordaron a la población que existen prácticas peligrosas que no deben realizarse en caso de mordedura: succionar el veneno, colocar torniquetes, aplicar hielo o hacer cortes, pues estas acciones pueden empeorar el daño.
Entre las recomendaciones básicas están limpiar suavemente la herida con agua y jabón, mantener elevada la extremidad afectada y acudir de inmediato al centro de salud más cercano.
Por otra parte, en Honduras existen varias serpientes altamente venenosas, entre ellas el barba amarilla, cascabel, coral, tamagás y timbo, por lo que los especialistas recomiendan extremar precauciones, especialmente durante actividades al aire libre.