Santa Bárbara, Honduras.- “Creía que el duende me había arrebatado el amor de mi vida”, narró con dolor el abuelo de Kimberly Sabillón Barahona, la pequeña hallada sin vida y con signos de violación en la aldea El Paraíso, en Petoa, Santa Bárbara.
El abuelo contó que cuando le dijeron que su nieta había desaparecido, dejó su trabajo y emprendió la búsqueda, pensando que un duende se la había llevado: "A Kimberly yo la busqué por todos lados, por zacatales, colonias y todos los lugares donde sospechaban que el duende había pasado. Yo pasé por un barranco, donde la niña estaba abajo, pero yo no la vi. Me cansé y me vine", contó.
Sin embargo, el señor recordó que cuando llegó a su casa, minutos después les dijeron que habían encontrado a la menor. "¿Está con vida la niña? 'No', me dijeron. Ahí se me bajaron las fuerzas y me tiré del barranco para abajo y ahí la vi. 'Esta es la niña', dije yo. Tenía roja la espalda y un machetazo".
"Fue violada, torturada, le hicieron hasta lo que no se puede hacerle", expresó el señor, quien cuidaba junto a su esposa a la menor, debido a que su hija trabajaba lejos del pueblo y solo llegaba cada semana.
Kimberly Sabillón Barahona desapareció el pasado lunes 24 de noviembre luego de que fue enviada a hacer un mandado y no regresó, por lo que comenzaron a buscarla con la esperanza de encontrarla con vida.
No obstante, la esperanza se desvaneció cuando su cuerpo fue localizado sin vida en un sector de la zona. Según versiones de los pobladores, la menor habría sido ultrajada sexualmente.
Vecinos y familiares exigen a las autoridades de investigación llegar hasta el fondo del caso, pues se presume que más de una persona estaría implicada en el atroz hecho.