“Yo no pago, yo denuncio” es el lema que utiliza la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA) como medio de orientación para que los ciudadanos no caigan en la trampa de las bandas de extorsionadores que bajo amenazas de muerte exigen fuertes sumas de dinero.
La denuncia, según las autoridades, es la mejor arma para combatir este flagelo, que no solo afecta a empresarios del transporte y a comerciantes, sino que también a la ciudadanía en general.
Lo que se debe tomar en cuenta para evitar ser víctima de las bandas criminales son los procedimientos que se deben seguir a la hora de presentarse a interponer las denuncias ante la autoridad correspondiente, según un miembro experto de la FNA consultado por EL HERALDO, a quien se le mantiene en el anonimato por su seguridad.
El presente año se han registrado hechos de violencia que, supuestamente, están vinculados con la actividad de la extorsión.
El viernes 27 de septiembre en el centro de la capital, dos supuestos extorsionadores cayeron abatidos a balazos a manos de un comerciante que, cansado de las amenazas, tomó la determinación de tomarse la ley por sus manos.
Tres días después, cinco miembros de una familia fueron asesinados en la zona de Chamelecón y entre una de las hipótesis que manejaron los cuerpos de investigación policial es que el crimen se habría derivado de una denuncia por cobro de extorsión.
Un oficial de la FNA explicó que a diario reciben un promedio de cuatro denuncias y que gracias a las operaciones han evitado el pago de 18.5 millones de lempiras a las bandas criminales.
Importancia de la denuncia
La extorsión es un delito que los maleantes cometen mediante la intimidación, amenazas de muerte para obligar a comerciantes y personas comunes a pagar fuertes sumas de dinero.
Quienes caen en la trampa de los extorsionadores al recibir la primera llamada tea
lefónica, una nota anónima o la visita de uno de esos delincuentes, comete un grave error.
Según el experto de la FNA, quien paga la primera vez una extorsión, es obligado por los maleantes a seguir haciéndolo en forma permanente bajo amenazas de muerte.
Lo que el experto recomienda es no contestar llamadas de números desconocidos, lo mismo que mensajes de texto.
Agregó que en el caso que la víctima haya establecido comunicación con el delincuente y éste empieza a intimidarla, que diga que va a colaborar y pedir tiempo para obtener dinero.
En ese lapso debe utilizarlo para trasladarse a las oficinas de la FNA a interponer la denuncia y allí recibirá asesoramiento de parte de personal certificado y confiable.
Primero, dijo, le van a escuchar cómo es el tipo de extorsión y el investigador va a analizar si es necesario tomarle la denuncia, porque hay casos que solo se necesita una asesoría.
“De ser necesaria la denuncia, se toma y la víctima será un testigo protegido”, expresó.
Apuntó que en la institución no se da ningún dato que revele la identidad del denunciante ni su dirección ni a qué se dedica, porque, “siempre vamos a omitirlo en todo caso”.
Eso, dijo, ha sido muy exitoso con los testigos protegidos, porque si las personas empiezan a negociar con el extorsionador, este sujeto le va a pedir fuertes cantidades de dinero y a él no le importa si la persona tiene que vender su casa, el vehículo y todo lo que tiene.
Agregó que finalmente la persona, ante tal amenaza, se ve obligada a salir huyendo.
El oficial considera que es importante que el afectado denuncie, porque la mayor parte de casos no es necesario irse del lugar, ya que la amenaza no es tan real en algunos casos.
Si se trata de personas que llegan personalmente a las casas o negocios a extorsionar, el oficial confió que tienen equipos especializados para planificar la operación de captura.
“Dependiendo del tipo de extorsionador y la forma que está utilizando, así mismo se dará la recomendación”, expresó.
Manifestó que todo caso de extorsión es solucionable, que solo es de que la víctima decida interponer la denuncia y se le ayuda en su problema.
El oficial detalló que han habido casos de extorsión fáciles de solucionar, pero las víctimas han sido mal asesoradas, por haber pedido consejos a la persona equivocada, la cual le dice que mejor pague.
“Eso es un error, porque con ese dinero que estamos pagando empezamos a fortalecer a personas que inician en la extorsión”, dijo.
Lo más conveniente, dijo, es denunciar y no ceder ante las exigencias de dinero de los extorsionadores.
El oficial confirmó que gracias a las denuncias se han capturado más de 300 delincuentes el presente año y que todos purgan condenas en los centros penales.
El artículo 222 del Código Procesal Penal establece una pena de 15 a 20 años de prisión para quienes cometen el delito de extorsión.
En el caso de que un extorsionador dé muerte a su víctima o a parientes, será condenado a cadena perpetua.
Medidas de seguridad en la casa
Asegurar puertas y ventanas a la hora de salir.
No dejar llaves visibles para evitar saqueos.
No dejar escaleras y otros objetos afuera.
Mantenga las puertas y ventanas bien cerradas.
Evite contestar llamadas de teléfonos desconocidos.
Evite establecer pláticas con personas extrañas.
Tenga cuidado con extraños que llegan en busca de información
Evite que los niños hablen con extraños por teléfono.
Si encuentra notas anónimas, denúncielo a la Policía.
Cómo denunciar una extorsión
Al recibir una llamada telefónica de un extorsionador, acuda a la autoridad.
Preséntese a la FNA a interponer la denuncia correspondiente.
También puede comunicarse con la FNA, vía telefónica, para denunciar.
Busque la asesoría de expertos, no pida consejos a la persona equivocada.
Tome todas las medidas de prevención al salir de su vivienda.
Evite hacer comentarios sobre su intención de interponer una denuncia.
Es importante que salga acompañado por algún familiar o amigo
Si observa a personas sospechosas, debe llamar a la Policía.
Si paga la primera vez, los maleantes seguirán cobrándole.