La Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA) le sigue los pasos a otros presuntos miembros de la banda denominada Los Rapiditos por suponerlos responsables del delito de extorsión en perjuicio de empresarios del transporte urbano.
Norma Moreno, portavoz de la FNA, informó que el mediodía del viernes ejecutaron allanamientos en dos casas propiedad del transportista Herminio Zúniga, uno en la zona 4 de la colonia Cerro Grande, bloque 42, casa número 7, mientras que el otro en la residencial Briceño, desvío a la aldea Guasculile.
Los agentes de la unidad policial no lograron la captura del sospechoso debido a que no se encontraba en ninguna de las dos viviendas, por lo que continuarán con los operativos.
Por su parte, otra fuente oficial de la FNA informó que Zúniga tiene una orden de captura pendiente librada por un juzgado capitalino por el delito de extorsión en perjuicio de sus compañeros dueños de autobuses urbanos.
Banda de Los Rapiditos
A mediados de enero, en una operación policial y de inteligencia, se capturó a parte de la banda dedicada a la extorsión en el transporte urbano. Las autoridades aseguraron algunas propiedades, incluidos autobuses de presuntos implicados en la actividad delictiva.
Algunos presuntos implicados en el delito de extorsión siguen prófugos de la justicia, por lo que equipos de la FNA realizan un trabajo de seguimiento orientado a dar con su paradero y proceder a capturarlos.
Moreno informó que los allanamientos son parte de una serie investigaciones que se iniciaron hace un año y que dieron como resultado la identificación de una banda.
Confirmó que ya han nueve personas en prisión por ese caso y que, de acuerdo a lo investigado, los encausados extorsionaban a sus compañeros.
Confirmó que la más afectada ha sido una cooperativa de transporte a la cual los miembros de la organización extorsionaban con un millón y medio de lempiras mensuales.
“Las personas que guardan prisión son transportistas, son dueños de buses y despachadores”, expresó la vocera policial.
