El senador republicano John McCain se sumó a otros miembros de su partido al cuestionar las explicaciones de Washington sobre el ataque del 11 de septiembre contra el consulado de Estados Unidos en Bengasi, en el que murió el embajador estadounidense en Libia.
McCain, entrevistado en el programa de CNN State of the Union, insinuó “algunas connotaciones políticas” en la explicación inicial del gobierno de que el ataque fue una espontánea manifestación antiestadounidense.
Sus comentarios fueron el último envión en lo que parece ser un esfuerzo coordinado del Partido Republicano para debilitar a Obama en términos de política exterior, un aspecto considerado un punto fuerte del mandatario y una gran debilidad de su rival, el candidato presidencial republicano Mitt Romney.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Susan Rice, dijo el 15 de septiembre que el ataque, de varias horas de duración, realizado con morteros y granadas propulsadas por cohetes contra el consulado de Estados Unidos en Bengasi, fue una manifestación espontánea desatada por un video aficionado que se burlaba del profeta Mahoma.
Cuatro estadounidenses, entre ellos el embajador Chris Stevens, murieron en el asalto.
Pero esa explicación fue revisada en las semanas siguientes, y el viernes, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (DNI, por sus siglas en inglés) dijo que el ataque fue planeado y vinculado a la red Al Qaida, pero destacó que aún había “muchas preguntas sin respuesta”. La explicación inicial del gobierno sobre el ataque fue completamente equivocada, dijo ayer McCain, candidato republicano a la presidencia en 2008. “Eso no se sostiene”, indicó.
“Fue ignorancia deliberada o inteligencia abismal pensar que la gente va a manifestaciones espontáneas con armas pesadas, morteros, y que el ataque se prolongue durante horas”, dijo a CNN.