Oslo, Noruega.- La líder opositora venezolana María Corina Machado compartió este jueves cómo vivió su llegada a Oslo, luego de más de un año sin contacto físico con familiares ni allegados, en el marco del reconocimiento otorgado por el Comité Noruego del Nobel.
Machado expresó su agradecimiento por el premio, al que calificó como un reconocimiento “único” al pueblo venezolano, señalando que este gesto ha generado nuevas expectativas y ánimo dentro y fuera del país.
Aseguró que aún intenta asimilar que finalmente pudo viajar a Oslo y reencontrarse con su familia, a quienes no veía “desde hace mucho tiempo” debido a las restricciones que enfrentaba en Venezuela.
Con un nudo en la garganta, Machado relató que "durante más de 16 meses no he podido abrazar ni tocar a nadie, así que ciertamente ha sido un sentimiento muy profundo".
La opositora contó que en cuestión de horas pasó de un aislamiento estricto a poder mirar a los ojos a las personas que más quiere, abrazarlas y llorar.
Señaló que estos momentos tuvieron un significado especial tras tanto tiempo sin contacto directo: "De repente, en cuestión de pocas horas, pude ver a las personas que más amo a sus ojos, tocarlos y llorar y rezar juntos".
También mencionó que pudo encontrarse con cientos de venezolanos que la esperaban afuera del hotel, algo que describió como “sentir calor humano otra vez” luego de un largo periodo de distancia.
Machado afirmó que estos gestos de apoyo son la razón que impulsa su lucha política, destacando que su motivación principal es la confianza que mantiene en la gente.
Cabe recordar que, la opositora fue galardonada con el Premio Nobel de La Paz el pasado miércoles -10 de diciembre-, razón por la que emprendió un riesgoso viaje desde Venezuela, hasta Oslo, donde sus familiares la estaban esperando.