Los jóvenes hondureños claman por el cese de la violencia en el país.
Esta mañana un grupo de estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), optó por protestar de manera creativa por lo que ellos consideran la militarización de la sociedad, que a su juicio viene a “normalizar la violencia”.
Desde tempranas horas de este día, en el acceso principal de la máxima casa de estudios en Tegucigalpa, se apreciaban varios barriles metálicos pintados con los colores propios de la usanza policial y militar. En su interior, bolsas plásticas negras rotuladas con los nombres de jóvenes que fallecieron de forma violenta en la capital, supuestamente a manos de elementos de seguridad del Estado.
“El Estado quiere hacernos creer que con poner más militares y cuerpos policiales en las calles, se acabarán los asesinatos y la delincuencia”, señaló una de las estudiantes organizadoras de la protesta.
Desde inicios de noviembre el gobierno de Porfirio Lobo Sosa puso en marcha la denominada Operación Relámpago, con lo que agentes de la Policía Nacional en conjunto con elementos del ejército se mantienen en las principales calles y avenidas de Tegucigalpa y Comayagüela.
“La violencia en la capital se ha reducido en un 90% durante los últimos días”, gracias a la Operación Relámpago, aseguró el mandatario hondureño el pasado fin de semana.
A raíz de la corrupción descubierta a lo interior de la Policía, el gobierno pretende dar a las Fuerzas Armadas facultades únicas policiales, a lo que se oponen varios sectores de la sociedad.
“Los fondos que ahora (el gobierno) está utilizando para comprar armas, botas y uniformes, lo deberían usar para la educación, las artes y el deporte”, recomiendan los jóvenes que esta mañana se manifestaban en contra de las medidas oficiales.
Las manifestaciones de los estudiantes y de otras organizaciones de la sociedad civil en contra de la violencia en Honduras se han intensificado luego del asesinato de dos jóvenes universitarios en octubre pasado, una de las víctimas era el hijo de la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos.
