Un grupo de propietarios de transporte denominados “brujos” o ilegales llegaron este miércoles hasta el municipio de Gracias, en el departamento de Lempira, para protestar y exigir que se les extiendan permisos de operación.
El Congreso Nacional desarrolla sus sesiones en el occidente de Honduras tras un período de vacaciones de casi un mes.
Los manifestantes, que suman aproximadamente unas 60 personas, gritaban en las afueras del gimnasio del Instituto Ramón Rosa de esa localidad, exigiendo que se les autoricen los permisos de operación.
Uno de los transportistas de los microbuses dijo que la principal exigencia es que los incluyan en la nueva Ley de Transporte, porque ya no quieren sufrir multas o tener problemas por operar fuera de ley.
Las protestas han sido continuas durante lo que va del año, con plantones en el Congreso Nacional, Casa Presidencial y el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) en Tegucigalpa.