Los reacios a rendir cuentas no solo serán suspendidos de sus cargos, además les impondrán multas.
Así dispuso actuar el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) contra los funcionarios que no presentaron en este año la declaración jurada de bienes.
En la Circular 004-2011-SG-TSC se notifica la imposición de multas en dinero, basado a lo establecido en las disposiciones emanadas en ley orgánica del ente contralor.
La circular informa: 'Que en los casos de incumplimiento de la obligación en la presentación de la respectiva declaración jurada de bienes dentro de los términos legalmente establecidos, sin perjuicio de la suspensión del cargo del servidor público que incurre en tal omisión, y previo a la recepción de la misma, se impondrá al infractor una multa de 5,000 lempiras'.
'A tal efecto se concederá un término de diez días hábiles a fin de que se proceda a enterar ante la Tesorería de este ente contralor el monto correspondiente a la multa referida'.
El TSC notificó que una vez acreditado el pago antes referido se dará trámite a la presentación de la declaración jurada, emitiendo la constancia respectiva por la sección encargada.
A la vez, el ente contralor aclara que en el caso de los funcionarios o empleados que hayan sido suspendidos de sus cargos, podrán ser reintegrados cuando presenten ante el director, jefe o encargado de Recursos Humanos la constancia que acredite que presentó la declaración jurada.
Dicha circular ya fue entregada a las distintas instituciones estatales, para su fiel cumplimiento. El TSC no maneja un dato de cuántos funcionarios presentaron la declaración jurada de bienes, ya que aún no se coteja los que lo hicieron de forma personal y otros por Internet.