Los médicos egresados de la Escuela Latinoamericana de Medicina (Elam) de Cuba suplirán a los estudiantes internos que se mantienen en paro en los hospitales públicos, luego de que ayer no se lograra un arreglo con autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Nueve horas de conversaciones entre los médicos en formación, la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, y el decano de la Facultad de Medicina, Marco Tulio Medina, durante la noche del jueves y madrugada del viernes, resultaron infructuosas, pese a que existían asomos de que la crisis se iba a solventar ayer.
Así las cosas, Castellanos dijo en conferencia de prensa que la Secretaría de Salud tenía “luz verde” para que unos 250 galenos de la Elam atiendan las áreas que estudiantes internos dejaron abandonadas desde hace 44 días en los sanatorios donde prestaban el internado rotatorio.
“Ya es potestad del ministro de Salud para que pueda utilizar los médicos de Cuba”, remarcó Castellanos.
Los egresados de la Elam no harán internado rotatorio en los hospitales, sino que cumplirán el servicio social de dos años que tienen que efectuar para que la UNAH convalide sus títulos.
Existen 92 graduados de esa academia que están acreditando los requisitos para hacer su servicio social y otros 158 que lo harán en los próximos días ante la Dirección de Educación Superior.
Cerca de 545 estudiantes de séptimo año de la carrera de medicina decidieron suspender su internado rotatorio para exigir que el contrato beca se les nivelara de 5,000 a 10,000 lempiras, que se construyeran áreas de descanso adecuadas en los hospitales y que las jornadas en los sanatorios fueran menos extenuantes, entre otros.
Las medidas de presión iniciaron el 29 de marzo de 2012 por parte de decenas de estudiantes internos en áreas no críticas.
Gradualmente se incorporaron más compañeros hasta totalizar los 545 en paro. La gota que rebalsó el vaso fue cuando los estudiantes abandonaron las emergencias.
La UNAH presentó, en la reunión de la madrugada de ayer, una propuesta de diez puntos en la que reiteró un aumento de 800 lempiras al contrato beca y mejorar las condiciones sanitarias donde hacen su práctica los internos.
Además se convocó a los estudiantes para que se presentaran a la UNAH a “audiencias de defensa” en las que se les juzgará y se determinará las sanciones por el abandono de su internado, de acuerdo a un reglamento.
También se dejó claro que quienes no hayan asistido al 50 por ciento del primer período de la pasantía de tres meses, perderían la misma, ya que “cualquiera que deja de asistir la mitad del período de sus clases está reprobado”, aclaró Castellanos.
La pasantía dura en total seis meses, pero se divide en dos trimestres.
Esto implica que unos 300 internos que hacían su pasantía en el hospital Escuela la tendrán que repetir ya que tienen una inasistencia del 50 por ciento.
Otros internos de San Pedro Sula, Tela y Copán sí tienen posibilidad de recuperar su pasantía porque sus ausencias son menores.
Los representantes de los internos llevaron la propuesta a su base y estos no la aceptaron porque consideran que existe tiempo para recuperar las horas clase de la pasantía.
La negativa se la comunicaron a un grupo de abogados en una sesión que se realizó en el hospital Escuela.
Como respuesta, la rectora y el decano de medicina respondieron que las pláticas con los internos quedan suspendidas y que el estudiante que quiera salvar su pasantía deberá presentarse de forma individual a las audiencias de defensa.
El decano Medina anunció que la UNAH sugerirá al Ejecutivo una iniciativa de ley para que se penalice el abandono de labores en los hospitales.
