Tegucigalpa, Honduras.- El Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) denunció una campaña de persecución, estigmatización y ataque directo contra periodistas hondureños, luego de la aparición de pancartas con mensajes difamatorios en distintas zonas de la capital hondureña, incluyendo en las cercanías de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Uno de los rótulos, que incluye los rostros de varios comunicadores reconocidos, entre ellos el presidente del CPH, Juan Carlos Sierra, tilda de “sicarios de la verdad” y “armas de desinformación masiva”.
El mensaje afirma que estos periodistas “no quieren que se realicen elecciones”, en alusión al proceso electoral programado para noviembre de 2025.
Además del ataque a periodistas, se colocaron otros carteles con leyendas similares dirigidas a políticos de oposición y sectores empresariales, lo que ha sido interpretado como una estrategia de hostigamiento contra voces críticas al actual gobierno y al partido oficialista Libertad y Refundación (Libre).
En un comunicado, el CPH condenó “la falsa y grosera leyenda” contenida en los rótulos y responsabilizó directamente al partido Libre, a su coordinador Manuel Zelaya Rosales y a la candidata presidencial Rixi Moncada por cualquier daño físico, moral o psicológico que puedan sufrir los colegas señalados.
“Advertimos que no nos amedrentarán en nuestro legítimo derecho de ejercer esta noble profesión. La libertad de expresión la defenderemos siempre”, expresó la institución.
El Colegio de Periodistas denunció también ante la comunidad internacional un plan sistemático de “persecución, odio, estigmatización e insulto a la integridad del periodismo”, promovido desde sectores ligados al poder.
Acusó a movimientos vinculados con “una izquierda recalcitrante” de ampararse en el anonimato para atacar a periodistas que ejercen una labor crítica e independiente.
Los rótulos fueron retirados horas después de su aparición, pero las imágenes circularon ampliamente en redes sociales y grupos de mensajería.
El Colegio de Periodistas concluyó su comunicado exigiendo a las autoridades una investigación urgente para dar con los responsables de esta campaña de odio. “Honduras no puede permitirse regresar a tiempos de censura, persecución e intolerancia”, afirmó la organización.
La difusión generó indignación en amplios sectores del periodismo y la sociedad civil, que ven en estas acciones un intento de intimidar y silenciar voces incómodas para el poder.
Este no es un hecho aislado: organismos nacionales e internacionales han documentado un incremento en los ataques a la prensa desde que Libre asumió el poder en 2022.
Reporteros sin Fronteras y la SIP han advertido sobre una narrativa oficial que constantemente desacredita a medios críticos, acusándolos de estar al servicio de intereses oscuros o de intentar desestabilizar el gobierno. EL HERALDO ha sido uno de los medios víctimas de estos ataques.
Anteriormente, se ha denunciado acoso, amenazas y ataques directos de las Fuerzas Armadas e instituciones del gobierno con anuncios de querellas.