La fresca mañana, iluminada por momentos por los tímidos rayos del sol, se combinó con la bella misión que llevaban los niños, maestros, padres de familia, patrocinadores y personal de este rotativo.
Al cierre de la campaña educativa, sus participantes quisieron crear un nuevo pulmón para la ciudad y recuperar el área verde ubicada en el trébol a la altura de Villas del Sol, que conecta el bulevar Fuerzas Armadas y el anillo periférico.
Es así que en este espacio, pequeñas manos plantaron diferentes especies de pinos y casuadinas, que son árboles forestales de raíz conífera.
En plena faena, “Don Castor”, personaje de Larach & Compañía , lograba la aceptación de miles de conductores, quienes hacían sonar las bocinas de sus automóviles en apoyo a la actividad ecológica.
Siembra de esperanza
Los rostros inocentes, pero llenos de energía de los niños, solo motivaba una cosa: seguir reforestando.
Muy emocionada, Francis Zorto, alumna de sexto grado de la escuela Cerro Grande II, consideró que la jornada, “más que una siembra de árboles representó una siembra de esperanza”.
“Los seres humanos necesitamos cultivar árboles para poder cosechar aire para vivir”, reflexionó la pequeña embajadora del ambiente.
Con herramientas en mano y sus miradas cargadas de sueños, la gran familia conformada por las Escuelas Amigables entregó a la madre tierra 50 arbolitos.
Responsabilidad Social
Involucrados de lleno en la actividad, los ejecutivos de Larach & Compañía, Supermercados Paiz, Océano, y Coacehl dejaron sus escritorios y se unieron a la inédita jornada impulsada por un medio de comunicación.
En la emotiva labor, la gerente de Mercadeo de Larach, Carmen Fléfil, destacó los valores inculcados a las escuelas en la campaña ambiental.
“Esta es una labor muy significativa para contribuir con la Honduras verde que todos soñamos”, destacó con emoción.
Reflexionó que la población no comprende que la causa de derrumbes e inundaciones se debe a falta de árboles y a la tala indiscriminada del bosque.
Entretanto, Lidia Landaverde, gerente de Mercadeo de Coacehl, describió la jornada como la mejor manera de sembrar la semilla ecológica y cultivar en los niños una cultura de protección a la naturaleza.
Al final de la jornada, los maestros guías agradecieron a EL HERALDO el esfuerzo en favor de la educación.