Luego de haber culminado las pasarelas masculinas de Milán y París y de la majestuosidad de la alta costura llegó la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid.
Esta edición, conocida antes como Cibeles Madrid Fashion Week, está marcada por las ausencias destacadas de Alma Aguilar y Adolfo Domínguez. Las pasarelas iniciaron ayer 1 y cerrarán el domingo 5 de febrero con la participación de reconocidos diseñadores.
En esta 55 edición el encargado de abrir el telón fue el diseñador gallego Roberto Verino.
Luego de la apertura hicieron su aparición los diseños de Jesús del Pozo, quien falleció hace apenas un mes. Su punto de partida es Oriente Medio y, en concreto, sus tribus nómadas; de ahí que abunden las creaciones de aparente libertad de formas y superposición de prendas.
La noche inaugural la cerraron Francis Montesinos, Duyos, Devota & Lomba, Victorio & Lucchino, Ágata Ruiz de la Prada y Elisa Palomino.
Jesús del Pozo y su colección llena de contrastes
Esta es la segunda colección de esta firma tras la muerte de su fundador, Jesús del Pozo; y, a pesar de la ausencia de este creador, la marca sigue conservando ese espíritu de elegancia de taller de costura que tanto le caracterizaba.
De hecho, la directora creativa de la firma, Ainhoa García, ha querido rendir homenaje a este estilo propio que se convirtió en seña de identidad de la casa, aunque, eso sí, con detalles de tendencia en esta edición de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid otoño invierno 2012-2013. Su punto de partida es Oriente Medio y, en concreto, sus tribus nómadas.
Muy reiterados son los cortes tipo capa, que cubren el cuerpo de las modelos a modo de manta dispuesta de forma improvisada sobre hombros y cabeza, y con largos que llegan hasta los pies.
El contraste de texturas es nexo de unión de toda la colección. De este aparente caos de materiales se generan unas impactantes creaciones con formas XXL. Para la noche, vestidos de línea sirena, muy femeninos.
La ciudad de Nueva York, inspiración del diseñador gallego Roberto Verino
Las creaciones del gallego Roberto Verino están inspiradas en la ciudad de Nueva York, su mezcla de culturas y la libertad de cada quien para desarrollar su propia personalidad a la hora de vestir son el arranque de su nueva colección.
Como es propio en su estilo, la riqueza de detalles es una constante sobre su pasarela.
“¡No al minimalismo!” parece ser el mensaje que transmite en cada una de sus creaciones. Aplicaciones de cristal y pedrería de Swarovski, paillettes, ribeteados en piel, hilos metalizados… Mezcla de tejidos y proliferación de texturas tratadas tecnológicamente para ‘renacer’ con acabados plastificados.
En general, gris, blanco y negro tiñeron esta colección de otoño invierno 2012-2013.
Cortes de patronaje clásico, que se mezclan con otros de inspiración años 70 y 20. De este universo, el pantalón de línea recta para ellas se convierte en un básico tanto para el día como para la noche.
Destacan también sus trench de plástico, sus abrigos con cinturones y sus blusas de pronunciados escotes. En cada una de las prendas destaca el uso de encajes, tweed y piel, aplicaciones con las que logró hermosos diseños.