Es bastante difícil encontrar en Hollywood una superestrella que nunca haya hecho la segunda o incluso la tercera versión de un mismo personaje en cine. Sin embargo, Kevin Costner es la gran excepción.
Sin prestarle atención a la tentación de los millones de dólares, jamás llegó a duplicar el éxito con nuevas versiones de Robin Hood, Dances with Wolves o The Bodyguard.
Y para alguien que mantiene semejante récord en un rincón tan inusual del mundo del cine, es curioso verlo en el principio de la historia del agente de la CIA, Jack Ryan, apadrinando a Chris Pine como una versión más joven del agente secreto que Harrison Ford, Alec Baldwin y hasta Ben Affleck ya habían hecho famoso en el cine.
¿Para una estrella de cine que jamás filmó la segunda parte de sus más grandes éxitos, no es gracioso verlo en el principio de la historia del mismo personaje del agente secreto Jack Ryan que interpretaron Harrison Ford, Alec Baldwin y Ben Affleck en otras cuatro películas? A mí también me causa gracia (ríe).
La vida es como un viaje. Y, definitivamente, mi vida fue un viaje cinematográfico donde las elecciones que tuve que tomar a lo largo de mi carrera se dieron así.
No significa que yo no haya querido hacer dos o tres películas del mismo personaje, ni me siento superior a quienes lo hicieron. Simplemente decidí alejarme de las historias que había hecho y mirando hacia atrás me encantaría tener varios capítulos dos de ciertas películas que hice, pero no funcionó así para mí.
¿Pero no es cierto que 25 años atrás usted mismo había rechazado el rol de Jack Ryan en la primera película The Hunt of Red October que ahora apadrina en la nueva película Jack Ryan: Shadow Recruit? Tienes razón, esa película me la habían ofrecido en el momento en que yo estaba filmando No Way Out, con el mismo productor.
Tampoco era una película que no quería hacer. No pude hacerla. Tenía otras obligaciones. El año anterior pensaba hacer una película y cuando terminé haciendo otra ya estaba comprometido por segunda vez con la anterior.
Ya no podía escaparme de nuevo. Tenía mis propios principios y no tenía dudas que la primera película del rol de Jack Ryan iba a ser un éxito en las recaudaciones, pero ya había dado mi palabra y tuve que hacer otra película.
¿Y si realmente hubiera aceptado protagonizar la película The Hunt of Red October, también hubiese quebrado el récord de no filmar segundas y terceras partes, aceptando la serie de películas Patriot Games y Clear and Present Danger, que después terminó haciendo Harrison Ford? Hoy pienso que probablemente lo hubiera hecho. Supongo que se presta para esta clase de libros.
También pude haber mostrado a Bull Durham en las grandes ligas y hubiera hecho una segunda película de Dances with Wolves para saber lo que pasó al final.
Me parece bien volver a interpretar un mismo personaje con el que estaba familiarizado. Por eso también me puso feliz que me llamaran para formar parte del principio de la historia de Jack Ryan, como un agente de la CIA, porque es una buena señal. Si uno logra mantenerse el tiempo suficiente, las cosas se pueden volver a dar.
En un mundo del cine donde tan pocas películas sobreviven el primer fin de semana de estreno, ¿por qué cree que un personaje como Jack Ryan logró sobrevivir más de 20 años en Hollywood? Para empezar, el autor, Tom Clancy, es muy bueno. Y cuando alguien escribe con un estilo clásico, el trabajo puede perdurar con el tiempo.
Los trabajos de los escritores que no lo hacen, desaparecen con el tiempo. El mundo siempre está en peligro y creo que él encontró la forma de capturarlo en un contexto inteligente. Además, pienso que todavía nos encanta quedarnos a oscuras por dos horas con historias así y las películas de Clancy funcionan muy bien en el cine, en comparación con otros libros.
¿A nivel personal alguna vez se puso a escribir un libro que sus hijos puedan leer en el futuro? Sí. Y creo que todo el trabajo que hacemos algún día será examinado por nuestros hijos.
Tu propia historia será examinada por tus hijos. Lo bueno de escribir es que se puede hacer en casa. Y ahora mismo estoy escribiendo una gran aventura de cinco volúmenes y estoy seguro que serán las mejores novelas de aventuras del siglo. Realmente lo creo. Pienso igual que Julio Verne. Se llama The Explorer’s Guild.
Tampoco es algo que escribí por completo, pero participé en la historia con la que estamos trabajando desde hace tres años. Y espero que pueda ser una de las primera animaciones de un libro donde el mundo entero pueda leer al mismo tiempo. Es una serie de cinco libros y cada uno tiene 600 páginas.
Es algo bastante comercial. También escribí ciertas historias contemporáneas que quiero hacer, como la próxima película sobre la Segunda Guerra Mundial. ¿La voy a hacer? Seguro. ¿Cuándo? No lo sé. Al menos sé lo que quiero hacer, porque escribir es demasiado difícil para mí.
¿Piensa volver a dirigir cine o es suficiente con el Oscar que ganó con Dances with Wolves? Me gustaría jugar la segunda parte de mi carrera dirigiendo más cine. Hay muchas películas que quiero hacer, pero soy bastante cabeza dura.
Soy un romántico y me cuesta aceptar las pruebas con el público que hacen hoy con las películas convencionales. Sé que así consiguen buena información, pero yo siento que al dirigir una película tengo un secreto en mi bolsillo que no veo la hora de contar. Y no quiero que mi secreto cambie demasiado.
¿Como actor y director le prestó más atención al trabajo de Kenneth Branagh, que dirigió y actuó en la película de Jack Ryan? Sí, es algo que siempre me interesa. Hasta que tuvimos el cine, cuando hacías el amor, no sabías si lo estabas haciendo bien hasta que viste a otro haciéndolo (ríe).
La verdad no sabías si realmente lo hacías bien... Y yo no sé cómo dirige otra persona hasta que veo su estilo. Kenneth es muy importante en nuestro negocio, porque logró que la gente quiera ver a Shakespeare.
Y con respecto al personaje del villano ruso que interpreta Kenneth Branagh, ¿nunca se cruzó con algún ruso preguntando por qué los eligen siempre como los malos de las películas en Hollywood? Yo toqué con mi banda en Rusia, en Moscú.
Estuve en la casa de Putin, pero también pasé por cafés donde la gente fue muy buena conmigo. Y gracias a Dios las fronteras están desapareciendo, es una buena señal en el mundo, porque todos llevamos la misma sangre.
¿Por qué Rusia? Es un oponente que vale la pena en el cine. Las buenas películas no tienen villanos fáciles, el malo tiene que ser muy bueno. Pero lo malo es que la gente crea que es verdad, porque por las experiencias que yo tuve en Rusia la gente no es para nada diferente.
¿Pero se da cuenta que hay gente fuera de Estados Unidos que piensa que los norteamericanos son los villanos? Yo soy muy patriota pero tampoco ignoro la historia de mi país y su participación en los eventos mundiales.
Me he cruzado con gente, incluso periodistas en conferencias de prensa, que tratan de hacerme decir algo que tiene el efecto exactamente opuesto conmigo, porque no voy a basurear a mi país. Solo tengo elogios para mi país.
Lo más difícil de conseguir, incluso en mi propio país es la buena información. Todos tenemos que ser como Salomón, tratando de saber quién tiene razón. Y es terrible.
Me encantaría que eso cambie. Por supuesto conozco los errores de Estados Unidos, pero estoy orgulloso de todo lo que hemos logrado, de verdad.
