TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Pese a que el Ciclón no vivió su mejor noche al tener en frente a un fuerte e incómodo rival, Agustín Auzmendi demostró por qué es el goleador del Apertura 2023 e impulsó a Motagua para vencer 2-1 a Marathón en la ida de las semifinales.
El Pistolero fue la gran estrella de un cuadro motagüense que sufrió ante un aguerrido conjunto Verde que salió decidido a no ceder terreno y dar el golpe en la capital del país.
Los primeros minutos fueron de color azul, pues desde el arranque Motagua trató de someter a un Monstruo que hizo caso omiso a los rumores de “pánico al Chelato Uclés”.
La sociedad Carlos Argueta-Lucas Campana parecía que iba a hacer estragos en la zaga Verdolaga, pero un imperial Luis Ortiz hizo que el Verde no extrañara al panameño César Samudio creciéndose en los tres postes.
Luego de una serie de ataques finalmente Lucas Campana logró su cometido tras recibir una dudosa falta penal de Sebastián Gorga.
La responsabilidad cayó en los pies de Agustín Auzmendi, quien con mucha frialdad doblegó a Ortiz y puso el 1-0 al minuto 17.
Pero el gol en lugar de darle ímpetu a Motagua hizo crecer a un Marathón que respondió rápido con su goleador Clayvin Zúniga, sin embargo, el ‘9’ no estuvo fino en el Chelato Uclés.
El más peligroso aviso de Clayvin fue un violento remate dentro del área que se estrelló en el poste y de forma milagrosa no se convirtió en el 1-1.
El juego era de ida y vuelta y tanto Azules como Verdes estuvieron a punto de mecer las redes, sin embargo, el primer tiempo acabó con ventaja motagüense.
Auzmendi figura
El segundo tiempo inició con el Monstruo dando un baldazo de agua fría a un coloso capitalino pintado de azul.
Tras un balón en profundidad, Clayvin Zúniga hizo una pantalla que dejó perdidos a los defensores motagüenses y habilitó a Isaac Castillo, quien con frialdad fusiló a Rougier y decretó el 1-1 a los 48 minutos.
El gol del Marathón dejó helada a la afición azul, sin embargo, El Pistolero apareció al rescate.
Carlos Argueta envió un centro como con la mano directo a la cabeza de Auzmendi, quien de palomita remató y dejó estático a Luis Ortiz para poner el 2-1 al minuto 55.
El tanto de Auzmendi cayó en un momento justo en donde parecía que Motagua comenzaría a pasarla mal.
El argentino demostró ser un killer y pese a estar solo en ataque ante la salida de Campana siguió siendo un dolor de cabeza para los defensores del Marathón.
Ya en el ocaso del partido, Marathón hizo su juego y logró bajarle el ímpetu a Motagua, llegando incluso a meter presión sobre la portería de Rougier.
La más clara de ellas fue una de Kilmar Peña, quien luego de controlar y acomodarse a gusto en el área, soltó un trallazo que se fue apenas por encima de los tres pastos. Las caras de angustia entre los motagüenses eran evidentes.
Finalmente el marcador no se movió más y Motagua consiguió una ventaja 2-1 de cara a la vuelta en el Yankel Rosenthal.
El segundo capítulo del clásico de las emes en semifinales será el sábado a las 3:00 PM. Al Monstruo Verde le vale un triunfo por cualquier marcador para decir presente en la final gracias a su mejor ubicación en la tabla, mientras que al Azul solo le vale mantener la renta obtenida esta noche.
