Tegucigalpa, Honduras.- Un tropiezo aquí, un plato de comida ignorado allá, y de pronto, lo que parecía torpeza comienza a revelar una alerta mayor.
La ceguera en los perros suele avanzar con sigilo, disfrazada de simples despistes que pocos dueños relacionan con un problema de salud. Sin embargo, cuando el entorno cotidiano ya parece un obstáculo en sí, es el cuerpo del animal quien a través de su mirada —teñida de una capa blanca— comienza a pedir ayuda.
“La desorientación es un signo que llama la atención y debe motivar de inmediato una visita al veterinario. Si su mascota se golpea con las paredes o no encuentra su plato de comida, algo no está bien”, advierte el médico veterinario Erick Solís, con la certeza de quien ha acompañado a muchos animales en este proceso.
Las causas pueden ser múltiples. Cataratas, glaucoma o trastornos degenerativos de la retina son algunas de las más comunes, muchas veces asociadas a la edad.
Es importante saber que este problema no siempre aparece de forma súbita ni avanza con la misma rapidez.
Manténgase alerta
Aunque el diagnóstico siempre debe recaer en manos profesionales, algunos indicios pueden explorarse en casa. “Una técnica sencilla sería alumbrar su ojo con la luz del teléfono y mirar la reacción del iris a la luz”, instruyó el especialista.
La ausencia de reflejo pupilar puede sugerir una pérdida sensorial significativa, pero hay otras pistas menos evidentes que también delatan un deterioro visual: caminatas vacilantes, evitación de escaleras, sobresaltos al menor sonido, o incluso actitudes defensivas ante el contacto físico inesperado, como retraerse o mostrarse nervioso.
Ambiente seguro para su mascota
Aceptar que la visión de nuestra mascota está menguando es un proceso tanto emocional como práctico. Aquí, algunos cambios que debe implementar en casa para ofrecerle un entorno predecible y seguro a su perro.

- Reorganice su espacio: Retirar obstáculos, mantener los muebles en su sitio y usar tapetes antideslizantes le permitirá a su perro moverse con seguridad. Un entorno establecido le dará la confianza necesaria a su mascota.
- Uso de olores: A partir de ahora, el olfato será su principal herramienta de orientación. Colocar aromas suaves en puntos clave, como su cama o el plato de comida, le ayudará a su perrito a reconocer los espacios.
Errores que debe evitar durante la transición
- Regañarlo por accidentes: Durante esta etapa, pueden ocurrir errores como derramar agua, tropezar o hacer sus necesidades fuera del lugar; pero no lo regañe, ya que solo le causará miedo y frustración.
- Dejarlo sin supervisión en lugares nuevos: Aunque esté adaptado a su casa, un entorno desconocido es un reto grande. Escaleras, objetos bajos o suelos lisos pueden ser peligrosos. En estos casos, su presencia es vital.
- No llevarlo al veterinario: La pérdida visual no siempre es irreversible. Algunas condiciones, como glaucoma o las cataratas, pueden manejarse si se detectan a tiempo.

Opinión del experto: Efectos emocionales
“Los perritos no pierden su alegría por el hecho de perder la vista. Si un perro ha sido tranquilo o cariñoso, seguirá siéndolo. Por eso, los propietarios no deben tratarlos diferente. Lo más importante es que todo en casa se mantenga en su lugar, que su comida y agua estén siempre en la misma posición, porque ellos logran orientarse bien usando el oído y el olfato”, cerró Solís.