Una nube de zancudos que a diario ataca a los ciudadanos amenaza con ser el preludio de un resurgir de las cuadrillas de ataque del Aedes Aegypti, mosquito transmisor del dengue. La mortal enfermedad que en 2010 apagó la vida de 53 capitalinos amenaza con cobrar nuevas víctimas.
Margarita Aguilar, residente de la colonia Nueva Suyapa, asegura que ha desempolvado los mosquiteros que mantenía guardados para proteger a sus hijos.
“De la nada han aparecido un montón de zancudos y tengo mucho miedo de que mis niños adquieran la enfermedad, en esta colonia muchas personas murieron en la última epidemia”, manifestó.
El temor de doña Margarita no se aleja de la realidad, las autoridades de salud han detectado un rebrote de zancudos en al menos 50 barrios y colonias de la capital, propagación que podría crecer de forma desmedida con el inicio de la temporada de invierno.
Solo las colonias Nueva Suyapa y Villa Nueva aglutinan el 30 por ciento de los casos que se han presentado hasta la fecha.
Roxana Araujo, coordinadora de la Unidad contra el dengue, asegura que estas comunidades son más propensas a la enfermedad por el almacenamiento de agua potable en baldes, barriles y botellas plásticas. “Estamos redoblando esfuerzos en ambas colonias porque son las de mayor incidencia”, afirmó Araujo.
Primeros casos
En 52 semanas de monitoreo, la Secretaría de Salud registra dos casos sospechosos de dengue hemorrágico en la ciudad, diagnósticos que fueron enviados a la Comisión de Certificación Nacional de casos de Dengue. Y uno en la ciudad industrial de San Pedro Sula. Por otro lado, unos 358 ciudadanos han caído presas del dengue clásico, casos que se han registrado en 11 barrios y colonias de la ciudad, entre ellos Villa Nueva, san Miguel, El Manchén y El Chile.
Y ante este resurgir del aedes aegypti, las autoridades sanitarias iniciaron el segundo ciclo de operativos de control y acción contra el dengue.
A la fecha se contabiliza la intervención de 5,685 viviendas fumigadas en 25 barrios y colonias en esta nueva etapa de lucha contra la mortal enfermedad. Además de la intervención de 150 kilometros de ríos y quebradas con insecticida que mata las larvas de zancudos. Pero además de la abatización y las fumigaciones, el mejor escudo de protección sigue siendo la prevención, los ciudadanos no deben bajar la guardia en la limpieza de sus depósitos de agua, el control de la basura y la limpieza general de sus hogares.
“Sabemos que este proceso de concienciación es bastante lento, nuestro técnicos y estudiantes de salud ambiental nos apoyarán en cada uno de los operativos durante el fin de semana, el objetivo es mejorar
la educación de cada una de las familias en manejo de recipientes con agua”, reconoce Araujo.
Los esfuerzos
Los inspectores de Salud trabajan a doble jornada en los operativos de fumigación de viviendas, abatización de pilas y barriles.
Para crear un control integral de la enfermedad se utilizará una nueva estrategia de lucha, esta semana la Unidad contra el Dengue realizará un operativo de control de llantas usadas.
Con camiones y vehículos doble cabina se procederá a recoger en barrios y colonias todos los neumáticos que mantengan almacenados los ciudadanos.
Y se está gestionando una nueva modalidad de fumigación desde el cielo con equipo de la Fuerza Aérea, a fin desinfectar un mayor radio de viviendas a la vez.
Además se prepara a 2,400 jóvenes como técnicos en salud ambiental para sumarlos a las filas del equipo de protección.
Antonio Canaca, jefe técnico de la unidad de Vectores de la Región Metropolitana, detalló que el objetivo de la educación es formar líderes comunitarios en cada uno de los barrios y colonias cercanas al Distrito Central. “No podemos olvidar la importancia de brindar consejería a los directivos de patronatos de cada colonia para reducir la incidencia de casos, sin el apoyo de la comunidad de poco o nada valen los esfuerzos”, afirmó Canaca.
