Tegucigalpa, Honduras.- La calle principal de la colonia Arturo Quezada de Comayagüela permanece inundada de aguas grises y agua potable en invierno y en verano, un problema permanente que destruye el pavimento en el sector.
“Y esta situación es más recurrente cuando llega el agua potable a la zona cada sábado y cada martes. Es un problema que la Unidad Municipal de Agua Potable y Saneamiento no ha podido resolver por años”, indicó uno de los habitantes del sector.
El entrevistado mencionó que cuando llega el agua, aun en tiempo de escasez del verano, se bota y mantiene el pavimento obstruido, ya que es un lugar bien transitado hacia otras colonias de la zona alta de Comayagüela.
“Se bota gran cantidad de agua por una falla en el sistema de acueductos que no han podido resolver y esto ya tiene muchos años de existir”, recordó Josue Flores, quien vive cerca del lugar afectado.
Otro de los problemas es que la tubería de aguas negras está instalada en un nivel muy superficial y las cajas de registro se obstruyen seguido, lo que genera una contaminación en la calle principal, por donde transitan miles de personas a diario.
Esta situación se presenta en la calle principal, exactamente en la estación de mototaxis, buses y taxis de la colonia, donde muchos viven la problemática día a día.
La administración anterior de la Alcaldía Municipal trató de solventar esta situación, pero el problema persiste debido a fallas en el sistema de agua potable y una mala instalación del sistema de aguas negras que hace más delicada la situación por el foco de contaminación que puede derivarse.

Esta vía es la principal arteria de la Arturo Quezada, con un alto tráfico por la mañana y la tarde. Muchas veces los conductores del transporte tienen que estacionarse en la parte más seca para bajar sus pasajeros.
“El llamado para la Alcaldía es que nos ayuden con esta problemática porque ya estamos cansados de caminar sobre agua contaminadas”, dijo una de las pasajeras que bajaba del transporte público en ese momento.
Esta calle es un lugar de mucho comercio, donde hay venta de comidas, negocios de pulpería, farmacias, iglesias que se exponen a un foco de contaminación. Miles de personas circulan durante el día, por lo que se pide a las autoridades den respuesta definitiva a la zona.
“A parte de el hedor cuando se arruinan los tubos de aguas negras que suceden de manera recurrente y esto nos puede enfermar”, consideró el entrevistado Josue Flores.