Tegucigalpa

'Me alegré al ver con vida al paciente que me contagió”: ortopeda del San Felipe

El doctor Henry Flores se sorprendió por el respaldo de familiares, amigos y pacientes con su enfermedad

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14.06.2020

TEGUCIGALPA,HONDURAS.- Con su rostro cubierto con una mascarilla blanca, una careta transparente con un llamativo soporte naranja, apenas se logra distinguir su mirada.

Pero la fortaleza y testimonio de vida, al haber superado la enfermedad que tiene de rodillas a la humanidad, se percibe con la firmeza de cada palabra que pronuncia.

La historia de Henry Flores, un médico ortopeda que labora en el Hospital de Especialidades San Felipe, es un ejemplo de los riesgos a los que se enfrenta el personal de salud.

El médico contrajo el coronavirus luego de atender a uno de sus pacientes que era positivo por la enfermedad.

Se convirtió en uno de los más de 500 profesionales de la salud afectados por la enfermedad en la incansable lucha por ayudar a los hondureños que llegan por asistencia a los hospitales del país.

El doctor Henry se convirtió en un profesional ejemplar pues al superar la enfermedad, regresó a seguir asistiendo a sus pacientes y se reencontró con la persona que sospecha le pudo haber contagiado.

A pesar de la dura experiencia, el galeno regresó desde el lunes de la semana anterior luego de una larga cuarentena.

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Así comenzó todo

El doctor Henry se graduó de médico general en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y se especializó como ortopeda y traumatólogo en Guatemala.

Jamás pensó que a pesar de tantos años de estudio y rigurosas medidas de protección sería un caso más de covid-19 en el país.

“El temor es algo normal en todos nosotros, uno de médico siempre está expuesto a estas cosas todos los días, de hecho es lo que uno ama, siempre estamos en riesgo. No es el primer paciente que he tenido con una enfermedad infectante o grave”, relató.

Sin embargo, hace más de un mes llegó al centro médico una persona con diabetes, de la tercera edad, con una infección grave en el pie derecho.

Y debido al estado delicado del paciente se tuvo que amputar el pie para salvarle la vida.

La persona se presentó con los síntomas derivados de la infección y producto de los nuevos protocolos se le practicó una prueba PCR para detectar o descartar la presencia del virus en el paciente. Días después el resultado fue positivo.

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En ese instante vino a su mente el momento en el que pudo haberse contagiado.

El galeno recordó que mientras atendía a la persona, su paciente se quitaba la mascarilla y le platicaba.

Dijo que sospecha que al momento de quitarse el equipo de bioseguridad pudo haber tocado la parte expuesta de la mascarilla con sus manos.

“Al saber que el paciente era covid positivo me autoaislé, me hice la prueba rápida y salió negativa y luego el hisopado, la que a los días me confirmaron que era positivo. Fui de ese porcentaje de los pacientes asintomático”, manifestó con consternación.

Al enterarse de que el virus estaba en su cuerpo, la ansiedad y el estrés se apoderó de él y aún recuperado no logra conciliar el sueño con tranquilidad.

La principal preocupación era contagiar a su familia.

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Reencuentro

Más de un mes de aislamiento fue necesario para liberarse de la enfermedad y regresar a trabajar.

“Me alegré al ver con vida al paciente que me contagió. Pensé que se iba a morir, pero es un señor fuerte de 75 años, salió de una sepsis por pie diabético y tuvo neumonía por el covid-19”, manifestó.

Todavía hoy su paciente está a la espera de los resultados para conocer si ya superó el coronavirus.