Tegucigalpa, Honduras.- Con sus camas, muebles y otros enseres cargados entre los mismos vecinos, decenas de familias hoy abandonan su hogar que durante muchos años les costó construir. Las intensas lluvias les obligaron a evacuar sus hogares, pues la saturación de suelos en la vulnerable capital de Honduras ha provocado numerosos derrumbes.
Entre los más afectados están los habitantes del sector conocido como "Cerrito Blanco", en la colonia El Reparto de Tegucigalpa, donde, entre lágrimas, familias enteras emprendieron un éxodo hacia casas de otros parientes o albergues en busca de refugio, pues lo han perdido todo.
Llanto, personas corriendo y subiendo lo que pudieron sacar de sus casas: este es el escenario que se vive en la zona, donde lo único que queda es intentar salvar sus vidas, pues ya perdieron sus viviendas y sus pertenencias.
"¡No, mis cosas se perdieron todas! Hace poco me vine para acá y perdí todo”, dijo una madre de familia, antes de desmayarse al ver su casa derrumbarse ante sus ojos.
"No tenemos a dónde irnos. Lo perdimos todo. Aquí no hay ninguna autoridad de Copeco que nos ayude", dijo otra mujer mientras consolaba a su familiar.
Con desesperación y tristeza porque ya había perdido su hogar, una vecina dijo: "Ayúdennos, por favor. Solo pedimos ayuda; no pedimos nada más que nos ayuden a sacar nuestras cosas. Ayúdennos para que otra gente no pierda sus casas. De todos modos, nosotros ya la perdimos todo".
"Hubieran traído camiones cuando la alcaldía estaba aquí, pero no sé qué pasó. Ayúdennos, por favor, solo eso les pido”, dijo, antes de apresurarse a ayudar a otro vecino a desalojar.
La pequeña Dana, con Quesito y Sam, sus mascotas, envueltos en una sábana, entre lágrimas dijo: “Muchos albergues no nos aceptan, pero yo los quiero”.
Otro poblador, identificado únicamente como don Rigo, con una maleta en su espalda, dijo: “Esto se vino, aquí no hay nada que rescatar. Lo poquito que tenemos hay que buscar dónde alojarlos. Los que nos van a alquilar duplican el precio; no tenemos dónde irnos.
Lamentó que hoy, después de tres años, tiene que salir de esta casa. "Tuvieron dos años y medio para reparar eso, pero fueron mentira de que iban a traer camiones y evacuar estas tierras”.
En horas de la noche del jueves 16 de octubre, las lluvias torrenciales que azotaron Tegucigalpa y varias zonas del país provocaron graves daños en viviendas, vías de comunicación y comunidades enteras, incluso, una joven de 23 años perdió la vida a causa de un derrumbe que cayó sobre su vivienda.
