Tegucigalpa, Honduras.- El pasar de los años va dejando su rastro en el cuerpo humano, entre más tiempo pasa, más estragos hacen las enfermedades y los padecimientos, es por eso que los adultos mayores son uno de los sectores de la población que más cuidados necesitan, pero los que menos acceso a ellos tienen.
Según datos registrados por la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), actualmente, el Distrito Central solo cuenta con un total de 99 centros especializados en servicios de cuidados para adultos mayores o como comúnmente se les llaman: asilos.
EL HERALDO visitó el hogar de ancianos Salvador Aguirre, uno de los pocos sitios que hay de este tipo en la capital, encontrándose con un lugar lleno de adultos mayores, algunos con discapacidades, otros con la vista perdida en la nada y otro grupo, un poco extenso, disfrutando de una siesta.
Este centro, en específico, tiene bajo su cuidado un aproximado de 67 adultos mayores. Según declaraciones de una de sus enfermeras, Reina Díaz, mensualmente reciben entre apenas dos o tres personas.
Según explicó Díaz, la mayor parte de ellos son personas “vulnerables, vulnerables me refiero a que fueron abandonados por sus familias, los traen las fiscalías, el Ministerio Público o la alcaldía”.
“Aquí se les da el servicio que se merecen como seres humanos que somos, que dieron al país en sus tiempos, ahora están recibiendo en este lugar la atención que se merecen: cuidados de aseo, limpieza personal, alimentación, médicos, si hay que llevarlos al hospital los llevamos”, explicó Diaz.
Esta debería de ser la vida de miles de ancianos abandonados que hay en la capital, pero, por el contrario, según la Sedesol, más de 30 mil no tienen acceso a ningún centro de este tipo.
En algunos casos, se debe a que están ubicados muy lejos de las zonas en las que viven (a más de 20 minutos caminando o en transporte), en otras es simplemente porque no existen.

Medidas
La coordinadora de la Defensoría de las Personas Adultas Mayores, del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), Astrid Díaz, expresó que “la situación de los asilos es bien preocupante ahorita en el país, siempre ha sido preocupante, pero ahorita se ha visto un aumento de limitantes”.
“Por ejemplo, para ingresar a las casas o a los hogares o a los asilos, están pidiendo unos requisitos de ingreso para adultos mayores, como que sean independientes, que no cuenten con recursos humanos técnicos y que no necesiten una pensión médica especial, que tengan que tener un cuidado personalizado”, lamentó Díaz.
Esto solo aumenta el nivel de acceso a estos centros para la población mayor, ya que aparte de la gran escasez que existe, los que hay, tienen un sin fin de requisitos que para una gran parte de ellos son imposibles de cumplir.
En algunos centros estas medidas se implementaron debido a la falta de personal y escasez de recursos financieros para contratar, en el caso de la casa hogar Salvador Aguirre, por ejemplo, se quejaron de que “después de la pandemia un montón de donadores se retiraron”, entonces sus posibilidades son muy limitadas.

Es por eso que Astrid Díaz, cree que es importante que el Estado no solo le de apertura a nuevos centros de cuidados, sino que, como una solución más rápida, hagan aportaciones económicas para mantener los que ya están en funcionamiento y así estos expandan su capacidad.
La Sedesol, en colaboración con otras secretarías, está lanzando una herramienta llamada “Georreferenciación de Cuidados”. Su función será localizar la ubicación de estas casa de hogar para que el Estado aperture nuevos centros en donde no hay, y aparte impulse los que ya están funcionando.
Hasta el momento, esta iniciativa se mantiene en pruebas piloto, sin embargo, una gran e importante parte de la población mayor espera resultados lo más pronto posible, para así poder abandonar la precaria situación en la que se encuentran.