Los resultados de la operación Libertad
que la Policía Nacional y
las Fuerzas Armadas
mantienen en la capital de Honduras
no son inmediatos; sin embargo, los operativos han dejado frutos, según el ministro de Defensa, Marlon Pascua.
Pascua aseguró que, pese a los homicidios registrados en los últimos días en varios sectores de Tegucigalpa y Comayagüela,
la operación Libertad ha sido efectiva.
'Al menos 69 personas han sido detenidas y se han incautado armas de fuego. Estas personas han sido puestas a disposición de las autoridades correspondientes para que se les lleve al proceso judicial correspondiente', dijo el funcionario a la radio local HRN.
Explicó que los militares necesitan del apoyo de la Policía para iniciar el procedimiento legal contra los sospechosos, ya que 'no están capacitados para realizar un trabajo científico en este tipo de acciones'.
'No participamos en las labores de investigación, solo en las labores de prevención, que sí han dado resultados', recalcó.
Además, sostuvo que los miembros del Ejército de Honduras
efectúan patrullajes a pie y en automóviles de forma permanente, a través de los retenes móviles en barrios y colonias de las ciudades gemelas, así como las salidas a Danlí, Valle de Ángeles, Olancho y El Tablón.
'Las operaciones se están realizando las 24 horas del día. Antes no encontraba presencia de nadie en la noche, ahora encuentra presencia militar y de la Policía en operaciones las 24 horas del día', insistió.
Reconoció que si bien es imposible cubrir toda la capital de Honduras,
porque 'no tenemos capacidad (...) pero nosotros estamos haciendo el esfuerzo'.
'Estamos contando con la cooperación de la población. He tenido la oportunidad de visitar las áreas donde se está trabajando. La población nos ha dicho, nos ha manifestado su alegría y su satisfacción po la presencia militar y sobre todo su cooperación, que eso es lo más importante para nosotros', expresó Pascua.
La denominada operación Libertad
dio inicio en Tegucigalpa y Comayagüela el pasado 8 de febrero. Posteriormente se extendió a San Pedro Sula,
la segunda ciudad más importante de Honduras, donde se registra el índice de homicidios más alto del país.
En los últimos tres años se contabilizan más de 20,000 homicidios en Honduras.
Solo en 2012, la tasa de homicidios cerró a 85.5 por cada 100,000 habitantes,
siendo la más alta del mundo.