Un fuerte operativo realizan las autoridades de la Policía Nacional en los distintos módulos de la Penitenciaría Nacional, ubicada en la aldea de Támara, al norte de la capital de Honduras.
Los operativos de inspección comenzaron a las 6:00 AM y tomaron de sorpresa a los reos, cuando elementos del Escuadrón Cobra y de la Policía Penitenciaria llegaron hasta sus celdas.
Los agentes recibieron instrucciones de buscar drogas, armas y teléfonos celulares que estarían en posesión de los reos.
Los operativos se extendieron al módulo de máxima seguridad.
Se sospecha que este operativo podría formar parte de las diligencias
investigativas
que se realizan en torno al
asesinato de Óscar
Ramírez, hijo del
exdirector
de la Policía Ricardo
Ramírez
del Cid y en el cual tres reos estarían vinculados.
Las primeras investigaciones relacionadas al crimen establecieron que al menos
tres reclusos, entre ellos un colombiano, habría contratado a pandilleros de la “18” para concretar el crimen en contra del muchacho, que se encontraba comprando comida cuando los pandilleros ingresaron al restaurante “Típicos de la Costa” y dispararon contra él y dos
guardaespaldas.
Los encargados de las investigaciones ya tendrían en su poder las identidades de las personas que
participaron
en el triple crimen.
Ramírez del Cid ha señalado al actual director de la Policía, Juan Carlos Bonilla, como el principal sospechoso
del asesinato de su hijo.
El comisionado afirmó que cuando mataron a su hijo, Bonilla se encontraba a inmediaciones del lugar. Pidió que sea separado de la institución policial
para evitar que entorpezca las investigaciones.
Del Cid ha manifestado que la investigación del caso ha sido contaminada y así lo confirmó el Ministerio Público, por lo que el hecho es investigado por tres fiscalías, de la Niñez, Derechos Humanos y de Delitos Comunes.
El ente acusador no ha descartado la posibilidad de pedir la suspensión del cargo del actual director de la Policía
para realizar las investigaciones pertinentes.