Sucesos

Matan a hombre en zona conflictiva de la capital hondureña

El señor Geovany Francisco Ferrera fue ultimado a tiros en la colonia San Juan del Norte.

    20.11.2012

    La violencia sigue imparable en la insegura colonia San Juan del Norte, sector de la Villa Cristina.

    Un hombre cayó abatido a balazos la mañana de ayer tras ser atacado por malhechores no identificados, sin que se conozcan los móviles del crimen.

    Un agente de la Policía Metropolitana 1 confirmó que el fallecido respondía al nombre de Geovany Francisco Ferrera, de 35 años, quien tenía su domicilio en la colonia Villa Franca, en la misma zona capitalina.

    Equipos de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) se desplazaron al lugar a realizar las averiguaciones preliminares orientadas a identificar a los autores materiales del sangriento suceso.

    Un doliente le informó a la Policía que el ahora occiso se dedicaba a recoger material reciclable y que no tenía enemistades personales.


    El crimen

    Según una fuente policial, alrededor de las 9:00 de la mañana, Ferrera transitaba por la calle principal de la colonia San Juan y, de repente, fue interceptado por individuos no identificados, quienes le dispararon sin mediar palabras.

    El infortunado recibió varios balazos que le provocaron la muerte al instante y su cadáver quedó tendido en el centro de la calle, mientras que los criminales se dieron a la fuga.

    Un agente policial confió que en la escena del crimen quedaron cinco casquillos de bala calibre 9 milímetros.

    Las autoridades competentes realizaron el reconocimiento legal del cadáver, mientras que un equipo de la Sección de Homicidios de la DNIC inició las investigaciones orientadas a establecer el móvil del crimen y a identificar a los responsables.

    Los moradores prefirieron no colaborar con los investigadores por temor a correr la misma suerte de Ferrera a manos de los malhechores.

    El clima de intranquilidad que integrantes de maras siembran en la zona tiene atemorizados a los vecinos, ya que, contantemente se registran asaltos, crímenes y violaciones, ante la falta de presencia policial.

    Además, se supo que grupos de supuestos mareros transitan por la calle con armas de grueso calibre, lo que genera un ambiente de terror.

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