Olancho, Honduras.- La profesora Aleyda Cabrera fue encontrada muerta la noche de este lunes en una calle que conduce a la aldea San Pedro, Gualaco, tras haber sido secuestrada días atrás.
Los captores exigían un rescate de tres millones de lempiras, pero las autoridades sospechan que el móvil del crimen fue una venganza, con el secuestro como distracción.
Cabrera, quien era muy conocida y querida en la comunidad por su labor docente y su participación activa en una iglesia evangélica, fue interceptada la noche del pasado 14 de enero.
Desde entonces, la comunidad y la familia realizaron colectas y campañas para reunir el dinero del rescate, mientras solicitaban el apoyo de las autoridades para su pronta localización.
El caso ha causado conmoción en Gualaco, Olancho, donde los pobladores se unieron en solidaridad con la familia de Cabrera, quien también era pariente del alcalde Edwin Cabrera.
Las autoridades continúan investigando para esclarecer los hechos.
