Juticalpa, Olancho.- Tras el fatal accidente de tránsito ocurrido la mañana de hoy en la aldea Rancho Quemado, continúan saliendo a la luz nuevos detalles sobre la tragedia que cobró la vida de tres personas y dejó una veintena de heridos. El siniestro se registró mientras los afectados se dirigían a ejercer el sufragio en una zona montañosa.
Según testigos, el vehículo en el que viajaban las víctimas perdió el control y dio varias vueltas antes de quedar destruido. Entre los fallecidos se encuentra un bebé de apenas meses de nacida identificada como Astrid Fabiana, mientras que los nombres de las otras dos víctimas aun no fueron confirmados por las autoridades.
De acuerdo con Santos Flores, de 65 años, quien logró sobrevivir manifestó que “venía de mi aldea en Río Frío, me informaron de dos personas muertas, pero al parecer son tres, los demás llevamos gran susto por ir a votar”.
Los cuerpos de socorro trasladaron de inmediato a los heridos al Hospital Departamental San Francisco, donde algunos de ellos reciben atención medica debido a la gravedad de sus heridas. Entre los afectados hay personas de distintas edades, desde adultos hasta menores.
En la lista de heridos en su mayoría menores, figuran Bessy Navaldiño de 25 años, Jesica López de 31, Carmen Hernández de 36, Carla Romero de 21, Santos David de 25, Humberto Flores de 30, Sindy Velásquez de 30, Santos Flores de 65, Alex Hernández de 12, Antony Flores de 4, Kelsin Flores de 1, Elmer Flores de 4, José Flores de 1, Wilmer Flores de 10, Gerson Flores de 7, María Flores de 1, Michel Romero de 3, Isidro Amador de 40, Marvin Fuentes de 29 y Edilberto Mendoza de 48.
Las circunstancias que provocaron el accidente se mantienen bajo investigación. No obstante, algunos testigos indican que el mal estado de la carretera y la velocidad a la que se desplazaba el vehículo pudieron haber contribuido al trágico desenlace.
Familiares de los fallecidos y heridos, solicitaron apoyo para cubrir los gastos médicos. Mientras tanto, la comunidad de Rancho Quemado sigue conmovida por la tragedia, esperando que las investigaciones determinen con precisión lo ocurrido y se tomen medidas para prevenir incidentes similares en el futuro.