TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los menores de 18 años siguen siendo un sector de la población hondureña golpeado por la criminalidad, que no solo abate a adolescentes sino de manera generalizada.
Entre los meses de enero y junio del año anterior, alrededor de 117 menores de 18 años murieron por causas violentas, en cifras porcentuales esto significó un 6.4% de un total de 1,834 homicidios.
Desde el 1 de enero hasta la fecha se han registrado en el territorio nacional 163 homicidios. De acuerdo a cifras preliminares, de estos, el 6.7% son adolescentes menores de 18 años, lo que representa 11 víctimas mortales.
De interés: Conadeh: En 9 años han muerto 51,000 personas por violencia
Una problemática especial
Migdonia Ayestas, coordinadora del Observatorio Nacional de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, es del criterio que “las muertes de menores de edad en Honduras se vuelven una problemática especial, una porque están bajo la tutela de sus padres y luego porque son de las principales víctimas de la violencia”.
Las estadísticas recabadas, además, establecen que el 46% de los fallecidos en circunstancias violentas son menores de 30 años de edad.
“Esto nos dice que de diez de las víctimas, cinco son jóvenes, por eso es necesario analizar la situación del principal activo del país, estos requieren mayor atención del Estado porque son los que se están formando y los que darán vida en el futuro cercano”, argumentó Ayestas.
En medio de masacres
Muchos de los caídos han muerto producto de hechos violentos enmarcados en homicidios múltiples o masacres, aspecto que también preocupa a los representantes del Observatorio de la Violencia.
“Se han vuelto un problema los crímenes de alto impacto en el país, donde hay jóvenes entre 16 y 17 años que están siendo víctimas y muchos de ellos son víctimas inocentes por estar en lugares no adecuados”, mencionó Ayestas.
Precisamente por esto han solicitado a las autoridades competentes del Estado para que desarrollen la investigación criminal para que se perfilen a las víctimas, que muchas son inocentes, reiteró la funcionaria.
En gran medida los crímenes de menores de 18 años han tenido algún vínculo con las maras y las pandillas.
“Desde hace mucho tiempo las pandillas comenzaron en Honduras a reclutar niños entre 9 y 17 años, los convencen para que formen parte de sus filas porque creen que a ellos no les llegará la acción del Estado”, explicó Migdonia Ayestas.
Además: Sicaria mata a balazos a un hombre en la colonia La Pradera de la capital
