Siempre

El artículo de Octavio Carvajal: Zurda, derecha y capos

Pese a que un buen grupo de parleros repite hasta por décima vez, otro “cipote” que no se quedó atrás y triunfó contra viento y marea es Óscar Nájera –íntimo de Irías Navas. Los dos seguirán navegando por cielo, mar y tierra. ¡Campeones!

09.12.2017

Tegucigalpa, Honduras
No existe duda alguna de que las frescas y reñidas elecciones dejó tragos amargos y dulces para tercos de la izquierda, de la derecha y pancistas. Aquellos “zurdos” que con o sin gorra le prendieron fuego a las calles no salieron de diputados ni de alcaldes. Igual ocurrió con viejos y jóvenes zorros de la política desplazados por artistas. ¡Qué condena mijos!

Extremistas de la izquierda y la derecha sufrieron un duro revés en las urnas. Empero, grupos oscuros de todos los partidos eligieron a héroes ligados al bajo mundo que están en la lupa de la Oficina para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) para pasar año nuevo en cárceles estadounidenses. Calladitos se irán o se los llevarán. ¡Tranquilos!

Te fuiste
Los comicios dieron golpes bajos a varios creídos de “defensores” de los aldeanos, de los derechos humanos, de las etnias… en fin, tutores de medio mundo con tal de seguir colgados de la teta legislativa y edilicia. Unos se fueron para no volver en los próximos cuatro años o tal vez más. De “populares”, cero.

Si bien el Tribunal Supremo Electoral (TSE) se “lució” como la madre de las tortugas en el conteo presidencial, las actas para diputados y alcaldes también marcaron índices variables constantemente y poco a poco mataron las esperanzas de muchos que rociaron billete por todos lados y no lograron salir de parleros, de alcaldes ni de regidores.

Tremendo golpe al bolsillo y al ego de numerosos hombres y damas de sinfín de colores que vendieron su “imagen” a través de enormes vallas publicitarias o anuncios en radio y televisión, pese a que observadores internacionales afirmaron que el oficialismo dobló en propaganda política a rivales de izquierda y a conservadores que salieron trasquilados.

Números
Los recuentos dan al Partido Nacional 61 diputados (47.66 por ciento); 30 al partido Libre (23.44 por ciento). Los liberales aseguran 26 curules (20.31 por ciento); el Pinu 4 (3.13 por ciento), igual suma la Alianza Patriótica del “amado” Romeo Vásquez mientras el Pac, la Democracia Cristiana y la UD ganaron uno por bando.

Los cachos perdieron en elecciones internas a caciques del Congreso. Libre sumaría tácitamente los cuatro del Pinu, que es parte de la Alianza, pero perdió bastiones como Rafael Alegría, que sigue muy triste porque su propio partido se lo sacudió en las urnas. Manuel “Mel” Zelaya no aspiró, pero a su modo de reñir el oscuro proceso metió de congresista a su hermano Carlos Zelaya y compañía.

Tal vez llegan Los Tigres del Norte como en los mimados tiempos del Poder Ciudadano a cantar “La puerta negra”. Si se instala la legislatura 2018, seguro se deleitarán con unos legisladores (líderes en sus aldeas) que son finos para entonar narcocorridos. Eso sí, al pie de un octavo de licor y de estimulante un pedazo del aguacate. ¡Pista completa papa! Ponla en do mayor. ¡Correcto!

Llamas
Otros grillos de Libre solo se quedaron con la boina. Las cámaras grabaron sus rostros cuando avivaban el vandalismo que incitaron por doquier al verse vendidos por sus bases. Rasel Tomé –el imitador de “Mel”- también se lamerá los bigotes desde la llanura. En su lugar salió la comisionada María Luisa Borjas, actual regidora capitalina.

Quién iba a creer que Borjas estará otra vez cara a cara con su cordial exjefe Óscar Álvarez. Parlarán como en el pasado reciente cuando Álvarez fue secretario de Seguridad en los tiempos de Ricardo Maduro y parte de la era perdida de su majestad Porfirio Lobo Sosa. Será de película verlos de cerca enviándose WhatsApps.

Los cachurecos ganaron más curules y alcaldías de las que imaginaron. Renovaron cuadros con damas y jóvenes –algunos de ellos cantantes y artistas de la televisión- que tendrán que estudiar muy bien la Constitución en sus primeros cuatro años de escuela en un Congreso con dominio azul, según las actas electorales.

Periodistas de un lado y otro también tuvieron su azote. El pueblo sigue hablando en las urnas porque ya no está para bromas. Ustedes, los personajes que viven de la inopia, recibieron su “bendición”. Saludos “camaradas”.