Apesar de que Estados Unidos es un país libre de creencias, los de la National Religious Broadcasters amenazaron con boicotear la película a menos que la Paramount, distribuidora de la película y co-financista con New Regency, emitiera una advertencia de que la película no era una interpretación literal de la historia del Génesis.
Esto lo hicieron como protección a los cristianos o creyentes que iban en busca de la interpretación literal del sagrado libro.
Por tal motivo, Paramount cambió su publicidad diciendo que la película era una inspiración de la Biblia, en lugar de decir que era una historia literal de la tal libro.
La película “Noé” costó realizarla más de $130 millones y su propósito principal es entretener e inspirar, esta película enseña y realza la obediencia y el amor a Dios. También es importante advertir que no es recomendada para niños pequeños porque está llena de acción y drama.
El Noé de esta película, interpretado por el grandioso Russell Crowe, se muestra fuerte y majestuoso en todas las escenas. La bondadosa y comprensiva esposa de Noé está interpretada por Jennifer Connelly.
Su papel es básico para entender una historia que en la gran pantalla mezclará el pasaje bíblico del diluvio universal con la espectacularidad y “la acción”, según nos ha explicado Connelly. “Noé es una película épica y espectacular. Impactante visualmente, innovadora, dramática e intimista”, según señala la actriz. Ella habla con gran devoción de su personaje, Naamé, cuyos críticos consideran se aleja de la realidad bíblica. Es “una mujer con mucha fe y mucha devoción hacia su marido pero se siente enormemente marcada por el profundo amor que siente por sus hijos”,
lo que le lleva a “cuestionarse la tarea que Noé cree que le ha sido encomendada”. Una interpretación de madre y esposa cautelosa, poco antes planteada en cine en roles similares. Aunque fue un rodaje largo, la actriz lo recuerda como “una prueba de resistencia” .
Delicada, vulnerable y modosita. Así la veía el mundo antes de Réquiem por un sueño (2000). Pero su papel de drogadicta echó por tierra todos esos calificativos.
“Llevo actuando desde los 11 años. Mis objetivos han variado, pero sigo enganchada a la interpretación. Me gusta que las películas sean proyectos colaborativos”. Madre de tres hijos, esposa de un compañero de profesión (Paul Bettany) e imagen de la marca de belleza Shiseido, a sus 43 años Connelly no para. La actriz afirma haber encontrado la estabilidad: “Me ayuda correr y hacer yoga, me concentra y relaja. Lo que realmente me importa es el bienestar y la felicidad.”
Es madre de tres hijos. Con tanto rodaje y sin parar de viajar, ¿cómo haces?
Basta con adaptarse. Esta profesión es un lujo. Empezamos Noé en agosto y terminamos en diciembre. Fueron tres meses y medio fuera de casa. Al concluir me volqué en mi familia. A veces llevo a mis hijos al set y aprenden mucho. La desventaja: el tiempo que dedico a cuadrar agendas.
En Noé luces canas. ¿te dejarías el pelo blanco?
Todavía no he tenido que tomar esa decisión. No tengo casi canas. Pero me gustan las melenas lisas y grises, son elegantes.
Tienes 43 y se te ve espléndida. ¿La edad es determinante en Hollywood?
En Hollywood y en muchos lugares donde uno tiene el cuerpo como herramienta. Pero yo estoy tranquila, con mi familia como prioridad y con trabajos futuros por hacer y estrenar. Por otra parte, yo soy más de trabajos fuera de la gran industria, el cine “indie” es lo mío...
¿Cuál es tu filosofía?
No me gusta seguir modas. Lo primero es sentirme cómoda; solo así me siento segura. Aprecio el diseño innovador pero no para vestirlo.
¿Tu diseñador favorito?
Me encantó el periodo en el que Nicolas Ghesquière estuvo en Balenciaga. Resumía mi concepto de buen diseño: sastrería, ejercicios geométricos, patrones inteligentes y estampados gráficos.
¿Es difícil compatibilizar vida personal y profesional?
Para Paul (Bettany) y para mí, pasar tiempo con nuestros hijos es una prioridad absoluta. Intentamos turnarnos en los papeles que aceptamos para que siempre haya alguien totalmente pendiente de ellos. Y cuando no estamos trabajando, nos encanta estar juntos. Por las mañanas vamos los cuatro juntos al colegio de los chicos. Somos como una manada de lobos (risas).
¿Y la fama no es un problema?
A veces ocurren cosas curiosas. Hace unas semanas, estábamos llevando a los niños a la escuela y vimos que había un paparazzi. Entonces, Stellan, mi hijo pequeño, se abalanzó sobre mí con los brazos en alto, tapándome para que no pudiesen hacerme fotos. Yo le dije: ¡No pasa nada, no te preocupes!, pero él se enfadó mucho. Luego la foto apareció en las revistas bajo el titular de El miniguardaespaldas de Jennifer Connelly (risas).
¿Tienes algún otra pasión o hobby?
Uno de ellos es pintar, que es algo que me apasiona y que hace mucho tiempo que no practico. Paul y los muchachos me regalaron unas clases de pintura y ya tengo ganas de aprovecharlas.
Yo estoy tranquila, con mi familia como prioridad y con trabajos futuros por hacer. Yo soy más de trabajos fuera de la gran industria, el cine “indie” es lo mío... ”
Mini Perfil
Nombre:
Jennifer Lynn Connelly
Nació:
12 de diciembre 1970
Lugar de nacimiento:
Nueva York, Estados Unidos
Pareja:
Paul Bettany desde 2003.
Proyecto:
La actriz luce extraordinariamente demacrada y aún más delgada que de costumbre en “Shelter”, por exigencias del guión. La película fue dirigida por su esposo Paul y rodada en Nueva York.
2001 “Una mente maravillosa”
- Lanzó su carrera al estrellato gracias al título biográfico dirigido por Ron Howard que co-protagonizó Russell Crowe. Por su
interpretación como esposa de Crowe consiguió el Oscar y el Globo de Oro como mejor actriz secundaria.
1991 “Rocketeer”- Adaptación del cómic del mismo nombre. Con su protagonista masculino, Bill Campbell, Jennifer dio inicio un noviazgo que duró hasta el año 1996.
1984 “Érase una vez en América”
- Logró debutar en el cine a los 11 años de la mano de Sergio Leone en esta película.