Su cortejo fúnebre recorrió en tren varios estados de la unión americana.
Abraham Lincoln, considerado por muchos como el salvador de Estados Unidos, protector y defensor de lo que él mismo llamaba “el gobierno de la gente, por la gente y para la gente”, fue asesinado el 15 de abril de 1865.
La vida del decimosexto presidente de Estados Unidos y el primero por el Partido Republicano fue cegada por John Wilkes Booth, un actor de Maryland, residente en Virginia y simpatizante del Sur, en el teatro Ford de Washington.
El hombre apareció de repente detrás del palco presidencial y disparó un único tiro con una pistola Deringer de bala redonda a la cabeza del presidente y gritó: ¡Sic semper tyrannis! (expresión en latín que significa “así siempre a los tiranos”).
Lincoln estaba acompañado de su esposa Mary Todd para disfrutar de la obra Our American Cousin, una comedia musical. Booth saltó desde el balcón al escenario; el público creyó que al incorporarse estaba haciendo una reverencia, pero la verdad es que se había roto una pierna.
Booth alcanzó cojeando su caballo y logró escapar. El presidente, mortalmente herido y tras ser atendido por el joven médico militar Charles August Leale, presente en el teatro, fue llevado a una casa atravesando la calle donde entró en coma hasta que falleció diez horas después del atentado.
Booth y varios de sus compañeros fueron finalmente capturados y ahorcados o encarcelados, aunque más tarde se demostró que algunos de ellos eran inocentes. La excepción de esto es el caso de Booth, quien fue abatido por un policía.
Los restos de Lincoln descansan en el cementerio de Oak Ridge en Springfield.
QUIÉN ERA.
Como un fuerte oponente de la expansión de la esclavitud en los Estados Unidos, Lincoln ganó la nominación del Partido Republicano en 1860 y fue elegido presidente a finales de ese año.
Durante su período, ayudó a preservar los Estados Unidos por la derrota de los secesionistas Estados Confederados de América en la Guerra Civil Estadounidense.
Introdujo medidas que dieron como resultado la abolición de la esclavitud, con la emisión de su Proclamación de Emancipación en 1863 y la promoción de la aprobación de la Decimotercera Enmienda a la Constitución en 1865.
Lincoln supervisó estrechamente el resultado de la guerra hasta que llegó a su fin. Movilizó con éxito a la opinión pública a través de su retórica y discursos; su discurso de Gettysburg es solo un ejemplo de ello.
Al finalizar la guerra, Lincoln estableció la reconstrucción, tratando de reunir rápidamente al país a través de una generosa política de reconciliación.
Su asesinato en 1865 fue el primer magnicidio en Estados Unidos.
SU ORIGEN. Nació el 12 de febrero de 1809 en una granja situada a 5.2 kilómetros de la ciudad de Hodgenville, en el actual condado de LaRue del Estado de Kentucky, lugar que en la actualidad es parque histórico nacional.
Sus padres, Thomas Lincoln y Nancy Hanks, habían nacido en Virginia y como tantos pioneros agricultores se habían trasladado al oeste. La familia Lincoln procedía de Inglaterra.
Abraham fue criado en el seno de una familia bautista, ya que tanto Tomás como Nancy Lincoln pertenecían a la Iglesia Bautista de Little Mount, situada cerca de Elizabethtown en el estado de Kentucky. Cuando tenía siete años de edad, su familia se mudó a Indiana.
Al cumplir los dieciséis años, Abraham fue contratado por James Gentry para conducir una almadía de géneros hasta Nueva Orleans.
Tras su muerte, 10 horas después de que Booth le disparara, el vicepresidente Andrew Johnson se convirtió en presidente cuando tomó el juramento de su cargo en el salón de la casa de Kirkwood el 15 de abril de 1865.