Centenares de bomberos y socorristas trabajaban el sábado para controlar un incendio que se desató en los almacenes del Centro Comercial Las Cascadas, al oeste de la capital, y que amenaza con propagarse a las tiendas, mientras helicópteros de la Fuerza Aérea salvadoreña lanzan toneladas de agua para sofocar el siniestro.
El presidente Salvador Sánchez Cerén, quien ordenó activar el sistema nacional de emergencias, se dirigió a la ciudadanía para tratar de llevar tranquilidad y lamentó este 'hecho doloroso para el país', al inicio del año.
'Es un siniestro muy grande', dijo el mandatario en la televisión nacional, que transmite en vivo el desarrollo del incendio.
Cuerpos de socorro informaron a The Associated Press que el siniestro habría comenzado a las 10 de la mañana y se reportan 13 lesionados, en su mayoría empleados del almacén donde se presume se originó el incendió.
En virtud de la magnitud del incendio,que consumió una tienda de Office Depot, un supermercado de la cadena Walmart y otros almacenes en el centro comercial Las Cascadas, en el oeste de San Salvador, el presidente Salvador Sánchez Cerén ordenó a la Fuerza Aérea movilizar helicópteros con dispositivos especiales por la 'dimensión enorme' del incendio.
Luego de más de tres horas de intenso trabajo, el ministro de Gobernación, Aristides Valencia, declaró a la prensa que el siniestro 'se encuentra bajo control' y que se inició una investigación para establecer sus causas y el monto de las pérdidas que originó.
El director de la Policía, Mauricio Ramírez, declaró que las 13 personas que fueron evacuadas de la zona afectada presentaban 'problemas respiratorios' por la inhalación de humo, pero tras ser atendidas en hospitales fueron consideradas fuera de peligro.
La portavoz de Walmart, Claudia Ibáñez, adelantó que los empleados serán reubicados en otras tiendas.
