Ciudad del Vaticano.- Con la emoción que lo caracterizó desde el día que salió al balcón tras ser anunciado como Papa, León XIV volvió a mostrar ese sentimiento al recibir el anillo de pescador durante la misa solemne de inicio de su pontificado.
El sumo pontífice se mostró visiblemente emocionado en el momento que el cardenal filipino Luis Tagle le impuso el anillo en su mano.
"Hoy, tú sucedes al beato apóstol Pedro", proclamó el purpurado en latín, antes de entregarle el anillo, que utilizará durante toda su misión.
De inmediato, León XIV se miró por unos instantes las manos, conteniendo las lágrimas al ver el anillo de oro que porta su nombre "Leo XIV" en latín y su escudo pontificio.
Luego el papa entra en un momento de reflexión y de oración.
En la misa celebrada en la Plaza de San Pedro, León XIV también recibió el palio, una estola de lana blanca que representa el peso del "rebaño" sobre los hombros del pastor, que está decorada con seis cruces negras de seda y enganchado con tres agujas que representan los clavos de la Cruz.
El rito de la imposición de estos símbolos empezó con una invocación: "Que el Espíritu de la Verdad, que procede del Padre, donde abundante inspiración y discernimiento a tu magisterio para confirmar a los hermanos en la unidad de la fe".