WASHINGTON, Estados Unidos
Las inundaciones en el estado de Virginia Occidental dejaron 23 muertos y muchas personas que debieron ser rescatadas de los tejados y de las rápidas correntadas, informó este viernes el gobernador.
'El daño es extenso y devastador. Nuestro objetivo sigue siendo la búsqueda y rescate' de personas afectadas, declaró el gobernador Earl Ray Tomblin en una conferencia de prensa después de las inundaciones causadas tras un día de fuertes lluvias.
'Tenía planeado volar alrededor de las zonas afectadas hoy mismo pero no me fue posible debido a que todas las aeronaves del Estado están siendo utilizadas para los rescates', dijo.
Tomlin había dado un balance de 14 muertos, pero Jessica Tice, de la oficina de Seguridad Interior y Gestión de Emergencias del estado, dijo a la AFP que la cifra de muertos había ascendido a 23.
Entre los muertos figura un niño de ocho años que fue arrastrado por las aguas mientras caminaba a lo largo de la orilla de un arroyo con su madre y su hermana, informó la cadena WSAZ.
Al menos seis condados han sufrido grandes daños estructurales y unas 66,000 personas quedaron sin energía eléctrica, sostuvo el gobernador.
La senadora Shelley Moore Capito dijo que había estado en contacto con la Casa Blanca para declarar zona de desastre a las zonas afectadas.
'Estamos presionando para obtener la declaración federal, no puedo imaginarme que no la otorguen', dijo a CNN.
Alrededor de 200 miembros de la Guardia Nacional fueron desplegados en ocho condados para ayudar a los socorristas locales y se abrieron 17 refugios para aquellos cuyas viviendas resultaron dañadas o destruidas.
Cerca de 500 personas quedaron varadas durante la noche en un centro comercial en Elkview, Charleston, cerca de la capital, después de que un puente que conduce a la carretera principal fue arrastrado por la corriente, informó ABC News.
Las inundaciones en el estado de Virginia Occidental dejaron 23 muertos y muchas personas que debieron ser rescatadas de los tejados y de las rápidas correntadas, informó este viernes el gobernador.
'El daño es extenso y devastador. Nuestro objetivo sigue siendo la búsqueda y rescate' de personas afectadas, declaró el gobernador Earl Ray Tomblin en una conferencia de prensa después de las inundaciones causadas tras un día de fuertes lluvias.
'Tenía planeado volar alrededor de las zonas afectadas hoy mismo pero no me fue posible debido a que todas las aeronaves del Estado están siendo utilizadas para los rescates', dijo.
Tomlin había dado un balance de 14 muertos, pero Jessica Tice, de la oficina de Seguridad Interior y Gestión de Emergencias del estado, dijo a la AFP que la cifra de muertos había ascendido a 23.
Entre los muertos figura un niño de ocho años que fue arrastrado por las aguas mientras caminaba a lo largo de la orilla de un arroyo con su madre y su hermana, informó la cadena WSAZ.
Al menos seis condados han sufrido grandes daños estructurales y unas 66,000 personas quedaron sin energía eléctrica, sostuvo el gobernador.
La senadora Shelley Moore Capito dijo que había estado en contacto con la Casa Blanca para declarar zona de desastre a las zonas afectadas.
'Estamos presionando para obtener la declaración federal, no puedo imaginarme que no la otorguen', dijo a CNN.
Alrededor de 200 miembros de la Guardia Nacional fueron desplegados en ocho condados para ayudar a los socorristas locales y se abrieron 17 refugios para aquellos cuyas viviendas resultaron dañadas o destruidas.
Cerca de 500 personas quedaron varadas durante la noche en un centro comercial en Elkview, Charleston, cerca de la capital, después de que un puente que conduce a la carretera principal fue arrastrado por la corriente, informó ABC News.