Hondureños en el Mundo

Frutos del mar de Honduras para el mundo

La familia Fortín Pineda logró emerger de una situación infortunada y hoy comparten su historia de éxito.
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01.08.2014

Bryan, Texas, Estados Unidos

Un infortunado suceso llevó a una familia hondureña a buscar nuevos horizontes lejos de casa y alcanzar su sueño, pero con la mirada puesta en lo nuestro.

El ingeniero Alfredo Fortín y su esposa Verónica Pineda forjaron con esfuerzo una empresa que creció a través de los años y a la cual incorporaron posteriormente a sus dos hijos: Melissa y Diego.

La familia Fortín Pineda se dedicó por largo tiempo a la pesca, empaque y exportación de pescados y mariscos para el mercado estadounidense.

Por más de 35 años trabajaron en Trujillo, Puerto Cortés y Omoa, donde instalaron una planta exportadora para la cual adquirían los productos del mar a pescadores artesanales de la zona.

Sin embargo, hace aproximadamente ocho años, la planta fue saqueada por delincuentes que no solo se llevaron por completo la maquinaria, sino que también intentaron incendiarla en represalia por denuncias efectuadas por la familia.

El hecho obligó a los Fortín Pineda a cerrar la planta exportadora, pues adquirir de nuevo los costosos equipos significaba comenzar de cero, con la zozobra de que un incidente similar ocurriera otra vez, pues las mismas autoridades expresaron que continuar con las investigaciones era muy peligroso.

La advertencia policial se convirtió en realidad, cuando luego de acudir a la capital de Honduras para efectuar la denuncia sobre lo sucedido, delincuentes fuertemente armados comenzaron a rondar las zonas donde habitaban.

Fue así que la familia decidió emigrar a Estados Unidos y montó en Bryan, Texas, su propia tienda de venta de mariscos al por mayor y al detalle. Así nació Fred & Fred Seafood Market.

'Nuestra tienda fue inaugurada el 24 de diciembre de 2013 y desde entonces, nuestra clientela crece más y más cada día', indicó a ElHeraldo.hn Melissa, hija del matrimonio.

Fred & Fred suple a otros negocios de varias áreas de Texas y mercados del norte en el área de mayoreo.

'Estamos orgullosos de ser hondureños en tierras ajenas y más aún de poder ofrecer productos de excelente calidad a los estadounidenses como el pescado y langosta hondureña', expresó.

Una gran parte del producto fresco que se encuentra en la tienda como el Yalatiel, Mero y Pargo son importados desde Honduras, principalmente desde Puerto Cortés y Roatán, y son vendidos en varias partes de Estados Unidos.

'En el futuro, esperamos poder suplir muchos más productos hondurenos en nuestra tienda e introducir muchas marcas de excelente calidad que hasta ahora son desconocidas para los estadounidenses'.