Honduras

'Ya no vuelvo a beber; sobreviví de milagro”

En el hospital Escuela se atiende uno de los intoxicados por consumo de alcohol adulterado.

06.07.2012

Rozó la muerte. La adicción a la bebida lo puso al borde de la muerte. Erick Manfredo Cervantes, un jornalero de 25 años que dice estar “vivo de milagro” tras intoxicarse con lo que consideró una bebida legal.

Aún convaleciente, acostado sobre una camilla del hospital Escuela, contó a EL HERALDO cómo sufrió la intoxicación.

El paciente, originario de San Isidro, Siguatepeque, en su lecho de enfermo, donde poco a poco comienza a recuperar la visión tras la momentánea ceguera que le generó el envenenamiento, dio a conocer su historia.

El viernes pasado, relató que había ingerido una botella de aguardiente Cinco Estrellas junto a un tío, como sucedía de forma habitual, confesó.

Aseguró que no se le agregó ninguna sustancia a la botella
que compró un establecimiento de la localidad y que él fue quien la destapó.

“Tomé Cinco Estrellas, estaba selladita, todo el guaro estaba sellado”, relató.

Malestar

Después de la ingesta de la bebida embriagante, ambos sintieron malestares. Erick Cervantes dijo que él se fue para su casa y que su tío se quedó en la vivienda donde residía, pero su pariente al sentir los mareos y vómitos tomó remedios caseros para aliviarse.

“él (tio) se empezó a sentir mal en el mismo momento
a la medianoche y comenzó a beber vasos con limonada y leche y se logró cortar el efecto de ese veneno”, refirió

En su caso, se sintió grave al siguiente día, pero no dijo nada a sus padres para no preocuparlos.

“No le quería hacer bulla ni a mi papá ni a mi mamá y me acosté a dormir esa noche (del sábado), sentía que la vista se me ponía negra y la cara gruesa (hinchada), me sentía medio bolo y no le paré bola.

Pasó la noche mal y en la madrugada la situación empeoró : “vomité a las tres de la mañana que apestaba a mortandad y el domingo amanecí bolo y la vista se me cortaba”.

En ese momento, Cervantes fue llevado por sus padres a un clínica privada de donde, el lunes lo remitieron al hospital San Felipe y de este sanatorio se le envió ese mismo día al hospital Escuela.

Luego de cuatro días en ese centro asistencial, Cervantes ha comenzado a recuperar en algún porcentaje su visión.

“Miro más o menos las formas de las personas, pero no puedo ver sus caras, no las distingo bien”, expresó.

Todavía no identifica los colores, pues cuando se le preguntó sobre el tono de una camisa en particular dijo que la identificaba “como negra o algún color profundo”, cuando en realidad su color es verde.

Cervantes es padre de dos hijos, un niño de seis años y otra menor de cuatro meses, vástagos por los que, aseguró, tratará de dejar la bebida.

“Esta es la última vez que bebo, ojalá”, exclamó.

“Tengo seis años de beber, han pasado varias cosas y yo que soy necio, yo no soy alcohólico”, expresó.

Con voz triste pidió “ que se haga justicia” con los casos de las personas que murieron intoxicadas por beber alcohol adulterado.

“Que se averigüe qué es lo que está pasando porque no es posible que siga pasando eso, mire, ahorita es “retajil” (bastante)
los muertos”.

Familiar

Por su lado, el padre de Erick Cevantes, José Cervantes,
aseguró que en San Isidro han muerto al menos cinco personas por intoxicación y otros más podrían perder la vida por esa misma causa.

Explicó que pese a la ley seca que se decretó en Siguatepeque esta medida podría tener pocos resultados, ya que muchos bebedores tiene guardado en sus casas botellas del aguardiente Cinco Estrellas que podrían estar adulteradas.

“El alcalde (de Siguatepeque) dio una orden de que no se venda alcohol, pero lastimosamente hay personas que se han llevado ese guaro para las aldeas
y ahí lo tienen, lo están consumiendo”, expresó.

La mayoría de las personas que han fallecido y los intoxicados son originarios de la comunidad donde reside la familia Cervantes, según los informes de las autoridades policiales y de Salud Pública.

Aún siguen los operativos en la zona.

Congreso conocerá ley para regular consumo y venta de alcohol

El Congreso Nacional conocerá en los próximos días un proyecto de ley para regular la producción, consumo y venta de alcohol, una iniciativa del Instituto para la Prevención del Alcoholismo, Drogadicción y Farmacodependencia (Ihadfa).

El documento ha sido elaborado con meses de anticipación a los hechos ocurridos esta semana en los municipios de Taulabé y Siguatepeque, Comayagua, en donde se reportó de forma preliminar la muerte de 21 personas a causa de ingerir alcohol adulterado.

El director del Ihadfa, Rony Portillo, dijo que el atraso en la presentación de esta iniciativa obedece a la oposición de la empresa privada, especialmente la que se dedica a la producción y venta de alcohol, pues no concuerdan con que se emitan disposiciones que mermen su negocio.

El proyecto propone controles de producción tanto para el alcohol industrial como el que se produce para consumo humano, sobre todo de los niveles que deben contener para que no causen severos daños a la salud. En cuanto al alcohol industrial, informó Portillo, que la ley solo permitirá la importación de insumos como el metanol por unos dos puestos aduaneros.