Mientras no haya una Policía honesta, confiable- y jueces y fiscales independientes- la lucha contra el crimen organizado será escabrosa.
“La independencia e imparcialidad de los jueces y fiscales es crucial para enfrentar la criminalidad y evitar la corrupción.”, dijo Carmen Rosa Villa, representante para Centroamérica de la ONU en materia de derechos humanos.
“Es posible investigar seria y eficazmente los delitos si los jueces y fiscales son probos e idóneos, si cuentan con cualificaciones y formación adecuadas y si, además, ejercen su función libres de amenazas”.
Mientras, Francisco Dall Anese, comisionado internacional contra la impunidad de Guatemala, dijo: “No podemos tener confianza en las instituciones si no tenemos jueces independientes. Yo no quiero como ciudadano hablarle a un juez que depende de un poderoso, que es el que va al final a tomar la decisión”.
En un estado de derecho los jueces y fiscales no deben tener padrinos políticos. Los jueces no pueden “estar secuestrados por un padrino político, por un empresario”.
