Tegucigalpa, Honduras.- El gobierno de Honduras, representado por el designado presidencial Renato Florentino en la inauguración de la nueva Embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa, destaco los lazos de amistad que unen a ambas naciones, desvirtuando así algunos rumores sobre diferencias entre sus autoridades.
Durante el evento de la apertura de la nueva sede diplomática, el designado presidencial dio un discurso en nombre de la administración de Xiomara Castro y congratuló al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump por su triunfo en las elecciones de noviembre de 2024.
“La República de Honduras felicita al presidente electo Donald Trump por su triunfo democrático y esperamos mantener unas buenas relaciones basadas en el diálogo y la reciprocidad, como así lo ha expresado la excelentísima presidenta Xiomara Castro en su mensaje de inicio de año”, expresó el designado presidencial.
Asimismo, reafirmó los lazos de amistad y cooperación con la nación norteamericana, resaltando los aportes de la administración de Joe Biden y de la embajadora estadounidense en Honduras, Laura Dogu.
“La presidenta Castro agradece al presidente Joe Biden, a la embajadora Laura Dogu y a todo su equipo de trabajo por la estrecha relación que hemos mantenido este tiempo, sosteniendo en distintas áreas de beneficio para el pueblo hondureño y el pueblo de los Estados Unidos”, prosiguió Florentino.
Trump regresará a la Casa Blanca para el período 2025-2029, siendo este su segundo mandato tras vencer a la demócrata Kamala Harris en los comicios electorales del 5 de noviembre del año pasado.
A la investidura del presidente republicano asistirá un reducido número de mandatarios latinoamericanos, quedando fuera de la lista Xiomara Castro.
Quienes confirmaron que asistirán a la toma de posesión son el presidente de Argentina, Javier Milei; el presidente de El Salvador, Nayib Bukele; y el presidente de Ecuador, Daniel Noboa.
Cabe recordar que durante el gobierno de Castro han habido discrepancias con la embajadora Dogu, tal como fue el caso cuando Honduras decidió dar por terminado el Tratado de Extradición entre Honduras y Estados Unidos en agosto de 2024.
Entre otras acciones similares, destaca cuando Castro advirtió con retirar la base militar estadounidense en Palmerola como medida de presión en caso de que las políticas migratorias afecten duramente a los hondureños que se encuentren en Estados Unidos.