El caso de las ovejas que aparecieron desangradas en una finca de Comayagua sigue sin resolverse (VER FOTOS).
En las últimas horas, las autoridades del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria (Senasa) revelaron que las marcas encontradas en los animales corresponden a las de un felino.
Wilfredo Fiallos, coordinador regional de (Senasa), descartó que el ataque a más de 52 ovejas en la hacienda del diputado liberal Valentín Suarez haya sido provocado por murciélagos
“Al revisar una de la ovejas se logró identificar que las heridas corresponden a cuatro dientes, dos inferiores y dos superiores, lo que significa que el atacante es un animal depredador o sea un felino”, dijo Fiallos.
De acuerdo con el funcionario, la muerte de los mamíferos pudo haber sido causada por un puma, que tras los incendios en los bosques pudo haber bajado de las montañas, y atacar.
Para efecto de análisis bacteriológico y hemogramas, un grupo de técnicos de Senasa extrajo de uno de los corderos muertos el hígado, cerebro, pulmón, tráqueas, riñón y ganglios, entre otras partes para estudiarlas.
Las muestras de sangre, tejidos y órganos fueron enviadas al Instituto Hondureño Médico Veterinario (IHMV), ubicado en la ciudad de Tegucigalpa, con la finalidad de analizar de forma científica los restos del animal atacado y de esta manera dictaminar en base a pruebas lo que sucedió en los corrales donde aparecieron muertos.
Además se le realizarán exámenes de encefalopatía espongiforme bovina (EEB) o enfermedad de las vacas locas, para descartar cualquier enfermedad de los corderos.
Las pérdidas que reportó el diputado Suárez tras la muerte de las ovejas se estima en 52,000 lempiras, en el caso que los animales tuvieran un valor de 1,000 lempiras, pero algunas que ya estaban grandes son comercializadas a 1,500 lempiras en la zona.
Los vecinos de los alrededores en un primer momento aseguraron que no escucharon ruidos fuertes para sospechar lo que sucedía en la noche, aunque en la actualidad algunos han revelado que escucharon algún bullicio, pero no imaginaron que estaban atacando a las ovejas.
Vigilantes de la finca donde sucedió la muerte de los 52 animales han montado guardia en los últimos cuatro días, sin que identifiquen algún animal que pudiera atacar una vez más el rebaño.
Según se informó a EL HERALDO, el caso es investigado por expertos de la capital para determinar la verdadera causa de la muerte de los mamíferos.
Esta es la primera vez que se registra un caso de este tipo en la comunidad. En el lugar donde murieron las ovejas también permanecen caballos y vacas, pero no resultaron afectadas.
