Tegucigalpa, Honduras.- Autoridades ambientales localizaron tres zonas deforestadas dentro del Refugio de Vida Silvestre Barras de Cuero y Salado, un ecosistema protegido ubicado en el departamento de Atlántida.
El hallazgo encendió las alarmas entre defensores del medio ambiente, debido al impacto que este tipo de actividades tiene sobre la biodiversidad de la región.
Durante una inspección en el sector de Boca Cerrada, San Francisco, Atlántida, el Instituto de Conservación Forestal (ICF), a través de la Fuerza de Tarea Interinstitucional Ambiental (FTIA), en conjunto con el Segundo Batallón de Protección Ambiental hicieron el hallazgo.
El informe de las autoridades del ICF revela que una de las áreas descombradas es de aproximadamente ocho hectáreas, donde se encontró un asentamiento no habitado con estructura de caña brava y techo de palma con una dimensión de 3 metros por 4 metros.
Además, en el lugar se localizaron de 22 semovientes y se decomisó un trasmallo de 80 metros, dos rollos de alambre de púas, tres bombas de fumigar, una bomba de agua, una motosierra, un alicate y cien pies tablares de madera de Teta y Santa María, lo que todo fue dejado en calidad de depósito en las oficinas del ICF en La Ceiba.
En la segunda zona, se localizaron cuatro hectáreas deforestadas, las que estaban cercadas con alambre de púas y destinadas para la ganadería.
Mientras que en la tercera zona se encontraron diez hectáreas descombradas, con cambio de uso de suelo las que estaban listas para la siembra de maíz, cubriendo unas cuatro manzanas de tierra.
En la misma operación también se neutralizó una estructura tipo comedero y varias bolsas para silo para alimento de ganado.
Las autoridades del ICF y miembros de las Fuerzas Armadas se mantienen alertar para detectar las zonas que están siendo deforestadas en diferentes regiones del territorio nacional, con el objetivo de defender y proteger los recursos naturales y la vida de la población en general.
