Las aguas del río Choluteca no solo generan tragedias y pobreza en la zona sur.
Y es que el afluente también es utilizado para la extracción de arena, grava y piedra, labor que permite que unas 200 familias subsistan a través de esta labor en el municipio de Choluteca.
Para algunos este oficio ha abarcado generaciones, al no tener otra opción de trabajo.
Alfredo Ávila, uno de los obreros que saca arena, dijo que comenzó su labor desde 1998 y gracias a este trabajo ha logrado profesionalizar a dos de sus hijos.
En la zona donde trabaja Ávila a diario unas 80 volquetas son llenadas con el material para la construcción.
Debido a que cada uno de los trabajadores ha perdurado en la zona en la actualidad se agrupan para trabajar y de esta forma generar mayores utilidades, las que son repartidas al final del día. Aunque siempre hay quienes prefieren trabajar de forma independiente, como Rigoberto Espinoza.
“Yo logro sacar dos viajes semanales, pero son suficiente para llevar la comidita a mi familia, que todavía está de pan en mano”, explicó Espinoza.
Una volqueta de grava cuesta 500 lempiras, mientras que la piedra y arena vale 200 lempiras en la orilla del río. Los conductores de las volquetas, al sumar el flete por el traslado y la ganancia por el acarreo, venden los cincos metros de grava por 1,100, la arena y la piedra a 550 lempiras.
Propuesta de la comuna
En la actualidad los denominados “areneros” se encuentran preocupados por la propuesta que han presentado las autoridades de la comuna al gobierno central para que se les conceda la administración de los productos que se extraen de los ríos.
El alcalde Quintín Soriano explicó que no serán afectados, pues lo que se busca es obtener los materiales a más bajo costo.
“Yo considero que de lograr esta propuesta obtendríamos un ingreso sustancial”, manifestó el edil.
