Tegucigalpa, Honduras.- El Congreso Nacional somete esta noche a tercer y último debate el dictamen de la controvertida Ley de Justicia Tributaria, en medio de la ausencia de una parte significativa de los diputados del Partido Nacional y del Partido Liberal, aunque con la presencia de la mayoría simple (65 votos) requerida para aprobar la normativa.
El dictamen mantiene intacta la propuesta presentada en 2023, sin incorporar modificaciones sustanciales ni las recomendaciones formuladas por gremios empresariales, cámaras de comercio ni sectores sociales.
La iniciativa contempla la creación de tres nuevos regímenes fiscales, la eliminación de al menos siete beneficios tributarios vigentes, y cambios relevantes en el Código Tributario, la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), la Ley del Impuesto Sobre Ventas (ISV) y el Código de Comercio.
Uno de los puntos más polémicos es la transición del principio de renta territorial a renta mundial, así como la incorporación de la figura del beneficiario final. Además, se faculta a la administración tributaria para revocar exoneraciones fiscales por vía administrativa, sin necesidad de acudir a un proceso judicial.
El dictamen también establece que, de aprobarse la normativa, Honduras avanzará hacia la adhesión a la Convención Multilateral sobre Asistencia Mutua en Materia Fiscal, un tratado que permite compartir información tributaria con más de 140 países.
A pesar de la amplia oposición de diversos sectores y partidos políticos, la sesión avanza con el quórum suficiente gracias a la presencia de diputados afines al oficialismo, lo que ha generado críticas por parte de la oposición, que alega falta de consenso y diálogo previo.