Honduras

Casi 300 sureños alojados en albergues tras inundaciones y destrozos por lluvias en Choluteca

Copeco tiene un registro de 297 personas albergadas. Salud se une a las labores de protección de los afectados con fumigaciones. Alerta amarilla se mantiene hasta hoy debido al pronóstico de fuertes lluvias en horas de la tarde

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12.06.2017

Choluteca, Honduras
El número de familias afectadas por las inundaciones que se reportaron en la ciudad de Choluteca, la tarde del sábado, va en aumento.

Las inspecciones del personal de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) ha permitido la identificación de 10 viviendas destruidas.

La similitud entre todas las estructuras es que fueron construidas a base de adobe, lo que aumentó la vulnerabilidad de las mismas ante los 190.7 milímetros de agua que cayeron sobre la ciudad en apenas 120 minutos.

Jaime Aguilera, subcomisionado de Copeco, informó que las inspecciones continúan en diferentes barrios y colonias de la ciudad.

“La población nos sigue llamando e informando sobre los daños que se reportaron en los diferentes vecindarios a los que estamos llegando progresivamente, ya que la ciudad está conformada por más de 100 y se nos dificulta llegar a todos de una vez”, comentó.

El funcionario mencionó que hasta la fecha se han entregado ayudas a más de 170 familias, las cuales reportaron daños en sus viviendas.

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Actualmente se mantienen abiertos cinco albergues, de los cuales solo uno ubicado en la colonia Javier Soriano es permanente, el resto es utilizado por los 297 albergados para ir a dormir.

“La gente se va a sus terrenos para tratar de recuperar lo poco que les ha quedado y por eso solo regresan en la noche para ir a dormir, lo que nos dificulta un poco cuando vamos a entregar ayudas”, comentó el subcomisionado.

La alerta amarilla se extendió por 24 horas en el departamento de Choluteca, debido a la saturación de agua en el suelo ya que hoy se esperan tormentas con acumulados de hasta 20 milímetros de agua.

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Fumigación

Las autoridades de la Secretaría de Salud se han unido al esfuerzo realizado por Copeco, la municipalidad y las Fuerzas Armadas para ayudar a la población afectada con fumigaciones en las casas a fin de evitar un brote de enfermedades febriles.

Las nebulizaciones arrancaron en el barrio Suyapa en donde se intervinieron más de 50 viviendas ubicadas en los sitios más vulnerables.

Las inspecciones se realizaron en los más de cinco barrios afectados por las inundaciones en la ciudad.

Giovanni García, coordinador de la red número 2 de Choluteca, anunció que en los próximos días se comenzará a levantar los índices de infestación en los barrios afectados.

“Lo que buscamos es que la población no se olvide de poner en práctica las actividades preventivas contra el dengue”, comentó García.

“Lo perdí todo, solo a mis hijos y mi loro pude rescatar”

Pese a que perdió su vivienda y los pocos enseres que tenía, Santos Maribel Guillén, de 47 años, le da gracias a Dios de estar con vida junto a sus tres hijos.

La tormenta del pasado sábado inundó varios sectores del barrio Javier Soriano en donde ella residía, la señora recuerda con una mezcla de sentimientos que lo único que pudo rescatar de su humilde casa fue a su pequeño loro “Luisito”.

“Es triste ver que todas las cosas por las que has luchado se vayan con la corriente de agua, ahora solo nos toca trabajar duro para reponerlas”, dijo la dama.

Si bien la mascota pasó dos días cubierto con una sabana para tratar de calentarlo se ha convertido en la sensación de juego de los 124 niños y 40 adultos que permanecen en el albergue de la escuela Andy Apple.

“Escuché un ruido, solo me salí de la casa y se desplomó”

Dora Isaura Cruz asegura que ver cómo se desplomaba su casa ante la fuerte tormenta que caía sobre Choluteca es una de las experiencias que nunca podrá borrar de su memoria.

Con el esfuerzo de su esposo, hijos y el suyo propio, la madre de cuatro adolescentes recuerda cómo hace cinco años construyó su casa con bloques de adobe y el sábado quedó reducida a lodo y escombros.

“Solo les dije a mis hijos que nos fuéramos, que cuando parara de llover íbamos a regresar a rescatar algunas de las cosas que teníamos, ya que la quebrada estaba subiendo su nivel y a mí me daba miedo”, recuerda.

La madre y sus hijos fueron recibidos por otro familiar en su casa, quien les ha dado un lugar donde vivir mientras reconstruyen su hogar.

“En estos momentos es cuando uno mira la solidaridad del familiar, amigo o vecino”, manifestó.