Tegucigalpa, Honduras.- En el marco de las restricciones anunciadas por el gobierno de Donald Trump en Estados Unidos para los migrantes indocumentados, el canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, anunció este sábado que el gobierno lanzará el programa “Hermano, vuelve a casa”.
Reina, quien llegó al Congreso Nacional para participar de la instalación de la cuarta legislatura, detalló que este programa incluye el apoyo de la red consular hondureña en Estados Unidos y México a lo largo de la ruta migratoria, ofreciendo asistencia legal y visitas de emergencia de los cónsules a los centros de detención donde se encuentren los catrachos.
Además, por medio de su cuenta de X (antes Twitter), agregó que el programa se fundamentará en tres pilares: un bono solidario para los migrantes, apoyo alimentario y un programa de empleo masivo.
“No dejaremos solos a nuestros hermanos y hermanos migrantes que han contribuido al país, coordinaremos con los Estados Unidos, para que se dé un retorno seguro, ordenado y que se respete la dignidad y derechos de nuestros migrantes”, puntualizó.
Asimismo, el funcionario añadió que en los próximos días anunciarán las medidas concretas en cada componente de este nuevo programa.
Migrantes son un motor no una carga
El programa también fue aplaudido por el designado presidencial Renato Florentino, quien acudió al evento en el Poder Legislativo en representación de la presidenta hondureña Xiomara Castro.
Durante su discurso de presentación de resultados y logros de 2024, Florentino destacó que “estamos en un proyecto de defensa, tomando diferentes medidas para nuestros migrantes, tras las amenazas de expulsión de Estados Unidos, Reafirmamos la defensa de sus derechos, nuestros migrantes han conseguido cada dólar con su trabajo honroso y tesonero que envían a sus familias, fruto de su esfuerzo, su sudor y determinación”.
“Con orgullo puedo decir que los hondureños somos la mejor fuerza laboral en Estados Unidos, demostrando que no somos una carga, sino un motor de desarrollo de esa nación”, añadió.
Y finalizó diciendo que “defenderemos sus derechos ante cualquier acción hostil y seguiremos trabajando para que quienes deseen trabajar encuentren un país con condiciones reales y dignas, migrante retornado recibirá bonos económicos, alimentación y propuesta de empleo con el programa creado por nuestro gobierno para el migrante, de nombre “Hermano, vuelve a casa””.
Previamente, el 1 de enero, Castro amenazó con retirar la base militar que Estados Unidos opera en Honduras desde los 80, si Donald Trump arremetía contra los indocumentados, como advirtió desde su campaña.
“Quiero manifestar que esperamos que la nueva administración norteamericana del presidente electo democráticamente, Donald Trump, sea abierta al diálogo, constructivo y amistoso. Que no tome represalias innecesarias contra nuestros migrantes, que por norma es un gran aporte a la economía norteamericana”, señaló la mandataria durante una cadena de radio y televisión.
Aseguró que sí Trump adopta una actitud hostil de expulsión masiva de migrantes, “tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”.