Tegucigalpa, Honduras.- Con su familia y amigos de testigos en la Ermita de la Virgen de Suyapa, Natalie Gabriela Acosta Ramos y Mario Roberto Cerna Palacios se hicieron una promesa ante Dios: amarse y respetarse hasta que la muerte los separe.
La pareja selló así su historia de amor que comenzó hace ocho años, y que han ido construyendo comprometidamente para dar el paso más importante para ambos.
La emotiva ceremonia religiosa tuvo lugar el pasado sábado 5 de julio, y fue oficiada por el padre Melvin Beltrán, fray carmelita que viajó especialmente desde El Salvador para presidir el sacramento en la Ermita de la Virgen de Suyapa, el mismo lugar donde Mario hizo la propuesta de matrimonio. La elección del lugar no fue casualidad: la pareja guarda un profundo vínculo espiritual con este santuario.
Los padres de los novios, Miriam Concepción Ramos Mercado y Jorge Alberto Acosta Villatoro, por parte de la novia, acompañaron con orgullo este significativo momento. Los padres de Mario fueron recordados porque ambos están en el cielo: Evangelina Palacios y Mario Humberto Cerna. Como padrinos, los acompañaron Rebeca Verhelst y Javier García.
Tras la ceremonia, los recién casados ofrecieron una recepción en el Hotel Clarion, donde celebraron junto a unos 170 invitados provenientes de distintos países, incluyendo Estados Unidos, Brasil, Guatemala, El Salvador e Islas Caimán.
La ambientación del evento fue bajo la temática "Adventure of a Lifetime", logrando una atmósfera mágica que reflejó el espíritu aventurero de la pareja, que entró al salón al ritmo de Something Just Like This, de Coldplay, una canción que simboliza el tono romántico y moderno de su historia.
Como broche de oro a esta celebración llena de emociones y memorias compartidas, los recién casados se preparan para disfrutar de su luna de miel en la costa oeste de Estados Unidos, específicamente en San Francisco, iniciando así una nueva etapa en su "aventura de toda una vida".